La última advertencia que recibió Elizabeth Anestiades permanece en su mente. Resuena cada palabra y se mantiene como una alerta. “Te voy a matar lentamente”, le dijo Juan Carlos Ostos Rodríguez, su ex pareja y padre de sus hijos. La mujer mantiene una controvertida disputa judicial y, a pesar de un pasado violento, no obtiene respuestas de las autoridades judiciales.
Elizabeth pide ayuda para recuperar su vida.
Elizabeth perdió todo, incluso padece que su ex pareja se haya apropiado de su casa y de los hijos de ambos. Actualmente vive en una pensión. Sus hijos son amenazados por su progenitor para impedirles mantener contacto con su madre.
"Mis hijos tienen miedo. No tenemos protección de nadie. Hace tres años que no puedo ver a mi hija. Y a mi otro hijo cumplió años la semana pasada y tampoco pude ver. Ayúdenme. No tengo abogado penal, ni perimetral, tampoco mis hijos. La Justicia no me escucha", dice entre lágrimas.
El infierno de Elizabeth comenzó en el embarazo de su primer hijo. Rodríguez la sometía a maltratos físicos. “No sabía a dónde pedir ayuda. No sabía a quién recurrir. Recuerdo que me dio una trompada. Mi cabeza golpeó contra la heladera y él se asustó. Los vecinos llamaron a la Policía e intentó escapar. Lo corrí y me empujó, caí por unas escaleras y sufrí una conmoción cerebral”, cuenta y repasa el episodio que denunció el 3 de noviembre de 2010.
A partir de ese momento, tomó la decisión de terminar la relación que tenía con Rodríguez. Pero los hostigamientos no tenían fin. Las amenazas continuaron. “Cada vez que nos veíamos, sea en una de las audiencias judiciales, o entrando a mi departamento, me golpeaba y hasta abusó de mi”, detalló.
Para difundir su caso, la mujer grabó un relato donde detalla el historial de tormentos que vive. Ese audio se viralizó. Se la escucha desesperada, leyendo un documento para no perderse en su dolor y no dejar de mencionar detalles importantes. Es una mujer con ganas de recuperar su vida y la de sus hijos. "Quiero volver a estar con mis hijos, que no sufran y que no vivan más esta tortura", detalla.
Como si fuera poco, Elizabeth sumó otro episodio que casi termina en un femicidio. Hace tres años, cuando regresaba a su casa en Almagro, en la que aún vivía con sus hijos, encontró sus pertenencias tiradas en el pasillo. “Cuando quise entrar me empujó y me golpeó. Me tiró al piso. Me dio trompadas y terminé internada en el Hospital Ramos Mejía”. Rodríguez no fue detenido, e incluso se instaló en ese domicilio.
El hombre denunciado.
"No quiero ser una menos, ayuda
Desde ese momento, comenzó una batalla judicial, no sólo por el inmueble sino por la tenencia de sus hijos. Este año pudo reestablecer el vínculo con el más chico de sus hijos, de 11 años, por decisión del Juzgado 10 de Capital, tras un suceso violento que sufrió el niño en manos de su propio papá. Sin embargo, los dos mayores continúan viviendo con el hombre.
“Mi hijo tiene marcas de los golpes y parece que eso no lo ve nadie. Necesito ayuda. Temo por mi vida, temo por la vida de mis hijos. Necesito que alguien me escuche. No tengo perimetral, mi hijo tampoco y estamos en peligro”, dice angustiada, y finaliza: "No quiero ser una menos, ayuda".
* Si sos víctima de violencia de género, o conoces a alguien que la padece, comunicate al 144 y realizá la denuncia.