10 Enero de 2017 11:30
La muerte de la argentina Luciana Farías en Brasil -que la policía de Buzios caratuló como "suicidio"- sigue generando dudas en su familia, dudas que será difícil evacuar si se considera que su viudo, el catamarqueño Pablo Angelina, había sido condenado por el crimen de Belén Galetto, su esposa anterior, a quien para la Justicia asesinó de ocho balazos en 1998.
El diario El Ancasti informó que la madre de Farías y una tía de Farías, y su abogado, Luciano Rojas, viajaron a Buzios para reconocer el cuerpo de Luciana. Según informaron, existirían audios de Whatsapp enviados por Luciana a varias de sus amigas y a su madre donde ella lamentaba que la relación ya no funcionaba. Angelina y Farías se habían casado en septiembre de 2016. Es decir que la relación había llegado a una crisis sin salida exactamente tres meses después. Estos datos contrastan con las declaraciones de Angelina a un amigo, según los cuales él y su segunda esposa (a la primera la asesinó) eran "refelices".
Pablo Angelina y Luciana Farías: ¿Qué pasó en Buzios?
La familia de Luciana entiende que ella pasó la noche de Año Nuevo sola con su cachorro de ovejero alemán, el mismo que según Angelina es ahora su única razón para vivir. BigBang se comunicó con Angelina a través de Facebook. El femicida de Belén Galetto se negó a hablar de la muerte de su segunda esposa, y remitió a su abogado, Carlos Telleldín, quien por otra parte ya habló con BigBang. "Por favor, dejen hacer el duelo. Estoy lleno de dolor. Enfermo. Y algunos medios siguen lucrando??? ", preguntó. Y ante una nueva pregunta, agregó: "¿Está mal que esté destruido? ¿O tampoco te interesa?"
Luciana fue sepultada en el cementerio de Buzios, donde la enterró Angelina aprovechando su potestad de esposo, pese al pedido de su madre de repatriar sus restos al país. Para la policía de Brasil el caso está cerrado. Para la familia de ella, no. Considerando los antecedentes de él, es absolutamente lógico.