Encerrada y sin salida. Así estuvo por seis días una mujer de 45 años en un departamento de Plaza Belgrano, en La Plata. El agresor la dejó en la calle, después de haberla violado y agredido durante los días en que la mantuvo cautiva.
Tirada en la calle y en grave estado fue derivada a un hospital, donde analizaron las marcas en su cuerpo. Tenía golpes, y heridas por el calvario. Hoy ya está en su casa y se recupera lentamente, según contó a BigBang el fiscal Marcelo Martini, a cargo de la causa.
La tortura se habría producido en una casa de la calle 36, entre 13 y 14, en La Plata.
Cuando recuperó el habla, contó que el hombre que le había prometido contratarla para que realice tareas domésticas la sometió, abusó de ella y le dio varias golpizas. Tras investigar el episodio, es inevitable la comparación con el caso Martínez Poch. Los detectives pudieron detener a un personal trainer y fisicoculturista de 50 años en el lugar donde habría ocurrido las torturas.
En la declaración de la mujer se describe al agresor como "un conocido instructor de artes marciales"
HORROROSO Y MACABRO
El caso trascendió en las últimas horas y según se detalló, la víctima estuvo detenido contra su voluntad desde la noche del 29 de octubre. Y luego de maltratarla, el 3 de noviembre, el agresor la dejó tirada en la calle.
Los detalles de lo que le hicieron son terribles. En cada relato hay escenas del horror y signos de la devoción por lo macabro.
"La mujer denunció, una vez terminada la pesadilla, que la habían drogado y violada de manera reiterada. Pudo reconocer que el fisicoculturista que le prometio trabajo la drogó para iniciar la tortura que duró casi una semana", cuenta Martini.
Néstor Monzón tiene 50 años.
El agresor fue identificado como Néstor Monzón, tiene 50 años y el abogado que lo representaría renunció. Ahora cuenta con un defensor oficial que inicia la lectura del expediente.
El nexo entre Monzón y la víctima se dio gracias al "Gurí", un conocido que la recomendó, y ahora está desaparecido, tras conocerse los tormentos que padeció la mujer y que no sólo eran sexuales.
Monzón la golpeó y la lastimó de gravedad. Luego de seis días, en donde tampoco le dio agua ni comida, el agresor la dejó en la calle, cerca de la casa de un familiar, en un estado deplorable.
"La hallaron muy lastimada, después de haberla buscado en los días que duró su desaparición. Estaba en muy malas condiciones, casi sin poder hablar", contó Marcelo Martini y aseguró que espera sumar más datos para conocer lo que sucedió durante el secuestro de la mujer.
La víctima -de quien no se brindan datos para preservar su intimidad- y sus allegados, fueron a la comisaría de Gonnet, donde ella vive, a hacer la denuncia. Después declaró ante la oficina de la DDI especializada en esta clase de delitos.
"La hallaron muy lastimada, después de haberla buscado en los días que duró su desaparición
“En los estudios que se le hicieron se constató que las lesiones que tuvo fueron graves. Tuvo varias hemorragias que si no hubieran sido atendidas a tiempo le podrían haber costado la vida”, aseguraron las fuentes del hecho. Una vez pasados diez días de estar internada en el Policlínico, ayer le dieron el alta, se informó.
A partir de la declaración de la víctima, se pudo establecer quién sería el instructor de artes marciales. Lo encontraron y fue detenido tras intentar lastimar a un policía. "Salió con un destornillador y quiso lastimar a los policías”, indicó el fiscal, quien mañana se reunirá con la víctima y el agresor.
Los oficiales pudieron reducirlo para luego comenzar con el registro. Se llevaron un celular, la ropa de ella y de él, más distintos elementos de prueba que contribuirían en la causa. Incluso, había un par de borceguíes de la mujer, con un cartel que decía “trofeo de guerra”.
No sólo en el colchón había manchas de sangre sino en varias partes de la casa, presumiblemente de la víctima.
MARTÍNEZ POCH, EL CASO SIMILAR
Cristian Martínez Poch fue condenado a 37 años de prisión por el abuso sexual gravemente ultrajante y privación ilegítima de la libertad de su ex pareja Vanessa Rial. También por la corrupción de menores y el abuso sexual gravemente ultrajante de sus dos hijas.
Martínez Poch
Los jueves entendieron que los abusos de Martínez Poch "alteraron el normal desarrollo y madurez" de sus hijas. En el caso de una de ellas, lo vivido le provocó "un grave daño para la salud mental".
En septiembre de 2013, Martínez Poch mantuvo cautiva en su departamento de La Plata a Vanessa Rial, y la sometió a múltiples abusos sexuales, golpes y le proporcionó narcóticos. La mujer fue rescatada por la policía y tras la detención, aparecieron otras mujeres que contaron sus calvarios.