17 Octubre de 2017 11:15
Una imagen conmovedora. Gabriel Otero se abrazó con Néstor García, padre de la estudiante de Educación Física que tenía la misma edad que Otero cuando fue secuestrada, violada y asesinada en Gualeyguay, el 1 de abril. "A mí me acusó la fiscalía, de ahí vino mi detención. Siempre estuve confiado. Pero se pudo comprobar mi inocencia. Estoy agradecido", dijo el joven que fue absuelto y está libre de "culpa y cargo" tras el veredicto por el crimen de Micaela García.
La imagen del abrazo. Foto: Juan José García - Clarín
El liberado es hijo de la pareja de Sebastián Wagner, condenado a prisión perpetua por ese femicidio. Pero, luego de permanecer seis meses de prisión domiciliaria, investigado por complicidad, se demostró que no tenía nada que ver con el crimen.
"El padre de Micaela me pidió perdón por lo que pasó. Fueron seis meses de encierro. Porque a pesar de no estar en la cárcel estuve con domiciliaria", dijo y antes de retirarse quiso aclarar que el condenado a perpetua no es su padrastro, como se dijo en los medios.
"El padre de Micaela me pidió perdón por lo que pasó
"Wagner no era mi padrastro, era pareja de mi mamá. Mi papá está vivo", señaló Otero.
Mientras tanto, la madre de Micaela sostuvo que no está conforme con las penas. "No es lo que esperábamos. No estamos conformes. Queríamos otras penas. A mi hija nadie me la va a traer", afirmó.
La familia no cuestiona la absolución de Otero, pero no está de acuerdo con la pena que recibió Néstor Pavón, que fue condenado a 5 años de prisión por encubrimiento agravado.