El personal trainer que este domingo fue detenido en Olivos -luego de golpear al vigilador de su edificio que lo había denunciado por no cumplir con el aislamiento por el coronavirus tras haber regresado de los Estados Unidos- declaró este lunes a través de una videollamada, en la que se defendió y excusó, aunque reconoció también que se "extralimitó" con la paliza.

Al finalizar la indagatoria, el fiscal de Vicente López a cargo de la causa, Martín Gómez, solicitó ante el juez de Garantías 4 de San Isidro, Esteban Rossignoli, que dada la naturaleza del hecho, convierta la aprehensión del imputado Miguel Ángel Paz en una detención formal por los delitos de "lesiones y amenazas".

Según informaron fuentes de la causa, la indagatoria fue realizada este mediodía a través de una videollamada realizada por celular desde la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Vicente López al teléfono del imputado, que se encuentra en su casa.

Al comenzar, a Paz se le leyó el hecho que se le imputaba, se le mostraron las pruebas recolectadas y se le indicó que tenía derecho a negarse a declarar, aunque de todos modos prefirió contar su versión de los hechos. "Declaró que estaba arrepentido de lo sucedido y reconoció que se había extralimitado con la golpiza, pero intentó deslizar que se defendió y se sintió agredido por el guardia cuando, tal como se ve en el video, éste lo empujó para sacarlo del puesto de seguridad del edificio", dijo a Télam una fuente judicial.

El mismo informante explicó que el acusado afirmó que antes del episodio, ya cumplía la cuarentena, pero que no sabía los alcances del decreto que lo obligaba a permanecer en su casa por haber regresado el jueves de Estados Unidos. Además, aclaró que la vez que salió de su domicilio fue por una emergencia familiar con su padre.

"Fui a aclararle los puntos", sostuvo el imputado ante el fiscal cuando contó que se enteró por los vecinos que el vigilador lo iba a denunciar ante las autoridades.

Ante estas palabras, el fiscal Gómez consideró, más allá de que los delitos que le imputa son excarcelables, que un hecho como éste merece una sanción ejemplificadora y que quedó demostrado que Paz no acata órdenes, por lo que podrían existir riesgos procesales cuando se lo requiera para algún trámite de la causa. De este modo, a pesar de que el acusado ya estaba demorado, ahora el representante del Ministerio Público solicitó su detención formal.

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El hecho, que quedó grabado por cámaras de seguridad, ocurrió cerca de las 21.20 del sábado pasado en un edificio situado en Rosales 2793, en la localidad de Olivos, cuando el vigilador Gustavo Granucci fue brutalmente agredido por el personal trainer.

El ataque se produjo en la sala del vigilador, donde Paz, que es inquilino en el edificio, se presentó molesto y comenzó a insultar al empleado de seguridad porque le había advertido que no cumplía con el protocolo de sanidad dispuesto por el Gobierno Nacional ante la pandemia de coronavirus para las personas que regresan de viajes de países extranjeros donde circula el virus.

"La concha de tu madre, ¿vos me estás amenazando a mí?", dijo el vecino a Granucci, quien le respondió que no lo estaba "amenazando" cuando le decía que le iba a aplicar una multa. "Vos no estás cumpliendo con el protocolo de sanidad, tomatelá de acá, salí de la guardia", le pidió el vigilador, a lo que el inquilino se rehusó y dijo: "¿Vos querés tener un problema conmigo?". Después de eso comenzó a golpearlo, y cuando el ataque culminó, Granucci llamó al 911 para dar aviso de lo que había pasado.

Además de la causa por "lesiones y amenazas" a cargo del fiscal Gómez, a Paz se le inició un segundo expediente en el que interviene el juez federal 2 de San Isidro, Lino Mirabelli, por la posible infracción de los artículos 205 y 239 del Código Penal de la Nación, que contemplan la protección de la salud general y el delito de desobediencia, agregaron las fuentes.

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El enojo de Alberto Fernández con el agresor

En declaraciones a Radio 10, el domingo a la mañana el presidente Alberto Fernández contó que se comunicó con el periodista Sebastián Tampone, quien difundió en su cuenta el video de la agresión, para preguntarle si se trataba de un caso real con el objetivo de obtener más datos que permitan su detención.

"Estoy buscando dónde vive ese señor para encerrarlo personalmente yo para que todos entiendan que no se puede jugar de ese modo, no se puede ser tan estúpido y no darse cuenta el riesgo en el que ponen a la gente", dijo el mandatario.

Del mismo modo, luego del hecho, Fernández se comunicó con el vigilador, a quien felicitó por su accionar y a quien le agradeció por la manera en que se comportó.