El miércoles al mediodía fue indagado por los fiscales Cosme Iribarren, Patricio Ferrari y Laura Capra en la Fiscalía General de San Isidro, en Acassuso 476, el psicólogo Carlos Ángel "Charly" Díaz, uno de los más complicados en la causa por "homicidio" que lleva adelante el equipo coordinado por el fiscal general de San Isidro, John Broyad.
Se trata del psicólogo personal de Diego Armando Maradona, quien fue a visitarlo el día que el astro murió hace casi siete meses en la casa del barrio privado de Tigre. En su declaración, que duró cerca de ocho horas, Díaz aseguró ante la Justicia que su intervención como especialista en adicciones "en ningún modo pudo haber influido" en la muerte de Diego y que su participación en la atención del Diez solo le trajo "perjuicios".
Al mismo tiempo, afirmó que su intervención en el tratamiento de desintoxicación "fue exitoso" porque el ex futbolista murió "sin drogas ni alcohol en su cuerpo". El psicólogo, que es uno de los siete imputados que tiene el expediente, llegó antes del mediodía a la sede de la Fiscalía General de San Isidro, junto a su abogado defensor Diego Olmedo, para ser indagado por "homicidio simple con dolo eventual", un delito que prevé una pena de entre 8 y 25 años de cárcel.
Según el letrado, Díaz respondió alrededor de 100 preguntas realizadas por los fiscales Ferrari, Iribarren y Capra, y "negó haber formado parte de un plan que terminó en la muerte de Maradona". Díaz es considerado por los fiscales por su influencia sobre el paciente como una pieza clave del “equipo médico tratante”, al cual se incorporó de la mano del abogado y representante del "10", Matías Morla.
Cabe recordar que la justicia de San Isidro le concedió el 19 de abril la eximición de prisión al psicólogo debido a que el juez Orlando Díaz delimitó el beneficio a la imputación de homicidio culposo -un delito excarcelable-, que es la calificación que por el momento tiene la causa. Sin embargo, Díaz es uno de los protagonistas de un audio, de poco más de una hora de duración, al que tuvo acceso BigBang.
La escucha pertenece a la reunión que se llevó a cabo el pasado 10 de noviembre en La Clínica Olivos, poco antes de que le den el alta a Diego por la operación del hematoma subdural. La misma se llevó a cabo entre el entorno de Maradona, entre ellos sus hijas, Dalma, Gianinna y Jana Maradona, y los médicos que atendieron al difunto DT.
El núcleo intimo de Maradona grabó la conversación donde Díaz se presentaba oficialmente como el "psicólogo especializado en adicciones" que iba a comenzar a tratar a Maradona. Frente a él no solo se encontraban las hijas de Claudia Villafañe y Jana, sino que también fue parte del encuentro el neurocirujano Leopoldo Luque, Maximiliano Pomargo, cuñado de Matías Morla, Verónica Ojeda y la psiquiatra Agustina Cosachov, entre otros.
Luego de que Dalma afirmara que a ella le habían dicho que a Diego le estaban regulando la medicación para no tener que "sedarlo como un caballo", Díaz aparece en acción: "Mi nombre es Carlos Díaz, soy psicólogo y empecé a trabajar hace poco porque justamente me especializo en adicciones y quería comentarles un par de cositas respecto a esto", explicó.
Durante su presentación, el psicólogo de 29 años sostiene que Maradona, una vez que reciba el alta tras su operación del hematoma subdural, debe estar con actividad terapéutica diarias. "No nos basemos solamente en un cuidado médico como una vigilancia porque entiendo que la vigilancia o el control tiene un límite en todo esto ¿o no?", pregunta, recibiendo la rápida respuesta de Gianinna: "De eso se va a rebelar de acá a la China...".
Cabe destacar que minutos antes, Dalma afirmaba en la reunión que su padre "a veces está más agresivo y a veces menos" dependiendo de la medicación que recibe. "Le están buscando el punto. No quieren ni pasarse para cuidar la salud de él y que tampoco te agarre a trompadas. Entonces están como probando y nos explicaron que en eso de probar es lento y hasta que den justo en lo que él necesita es difícil", resaltaba la mamá de Roma.
Lo cierto que durante su turno, Díaz sostiene: "Se va a rebelar con todo...(por Maradona), pero también está claro en la experiencia que no puede tomar ni una gota de alcohol. Acá es alcohol cero....Lo mismo, lo que hablábamos con Agustina (Cosachov) y el equipo, el tema de psicofármaco, tener contabilizado todo lo que toma, pastilla por pastilla. No tiene que haber margen de error porque hay una tendencia natural a ir por más siempre."
Y agrega: "Otro tema que me parece importante es saber qué pasa después del hematoma subdural ¿no? y cómo reacciona él frente a esto porque, tal vez, hay una mejoría que puede llegar a motivarlo y tenemos que aferrarnos a eso. La idea es, obviamente cuidarlo los primeros días al máximo....otro aspecto que me parece súper importante Agus, que lo charlamos nosotros, es ver si podemos meterle disulfiram en todo esto viste".
El disulfiram (el disulfiram recibió la aprobación de la FDA para tratar el alcoholismo en 1951) es un fármaco usado para ayudar en el tratamiento del alcoholismo crónico. Produce una reacción aguda y aversiva tras el consumo de etanol. "Yo me comuniqué con esta psiquiatra que convocó Swiss (Medical), que justamente yo trabajé con ella y demás, y conversamos respecto al naltrexona y el disulfiram. Él estaba tomando naltrexona...", aclara Cosachoy.
El disulfiram, también conocido como Antabuse, puede usarse para interrumpir el metabolismo del alcohol, haciendo que los pacientes se sientan enfermos si beben. Y, por lo tanto, desincentivan el consumo de alcohol. Algunos estudios sugieren que el disulfiram puede ayudar a los pacientes a limitar el consumo a corto plazo, pero otros ensayos han mostrado resultados mixtos en términos de eficacia.
Luego que los médicos señalaran que el alcoholismo o la adicción de Diego por el alcohol se debía a un tema "conductual" que debía ser trabajado "con educación", Díaz volvió a levantar la voz para explicar: "Me parece que estratégicamente una cosa es contener a una persona que quiere ir a consumir alcohol y vos le negás eso, y otra cosa es contener a una persona que quiere consumir sabiendo que no lo va a poder hacer porque consumió disulfiram".
De acuerdo con sus palabras, a éste último le va a generar una "reacción adversa". "Entiendo que acá hay que cuidar el vínculo, entonces desde ese lugar si no vas frente a frente, o sea yo no quiero que chupes...y así no funciona. Decirle ´Diego, por favor aguantá que tomaste esta medicación y etc, y si uno le explica bien el efecto adverso, no vas frente a frente", resaltaba el profesional.
Durante cada una de sus participaciones, Díaz sostenía que para tratar la enfermedad de Maradona, todo su entorno se debía mostrar "unido" ante sus ojos. "Porque si no, se van a ir desgastando todos los vínculos. Primero con vos, con vos y con vos, y va a llegar un momento que no va a quedar nadie. Entonces me parece que el punto es no desgastar el vínculo acá. Generar el vínculo y apuntar a esto", resaltaba.
Y continuó: "Igual dos cosas. Una cosa es un adicto en carrera que viene tomando todos los días. O sea, ahí desayuna con champagne y es lo mismo. Acá se ganó tiempo limpio y eso es fundamental. Acá hay que capitalizar el tiempo limpio más allá de todo lo que esté pasando en el medio". En ese momento, Jana le explica al psicólogo que había días en los que Diego se levantaba y "pedía una copa de vino o cerveza" para desayunar.
Razón por la cual Díaz sostuvo que la operación en la cabeza les iba a otorgar el tiempo que necesitaban para tratar el alcoholismo de Maradona. "Una operación cerebral no es que no es nada. Más allá de que es Diego y su personalidad, en algo le tiene que afectar, lo tiene que movilizar. Eso hay que capitalizarlo de alguna manera. El tiempo limpio también es para deslumbrar soluciones", explica.
Y suma: "Antes no se podía porque vos tenés que tener unos días limpios para poder incluir esa droga ¿sí? Entoncés, hoy estamos como en otra situación. Lo que está bueno es no desgastar ningún vínculo, porque sino ahí perdemos. En el desgaste 24/7 es viable en todos. Diego va ir, va a ir, va a ir..., pero me parece que eso es fundamental. También el tema del peso, de verse mejor, a veces el disulfiram viste, con naltrexona y el Bupropion...puede servir".
Según explicaba el profesional en los audios, a Maradona había que "motivarlo" para que intentara luchar contra las adicciones. "Hay que motivarlo desde ese lugar, para que se vea mejor. Ustedes lo saben mejor que nadie, pero entiendo que para él lucir mejor, verse mejor y estar más atlético, va a ser importante", dijo, ante la afirmación de su familia que era la lesión de su rodilla y la poca movilidad que tenía lo que entristecía y deprimía al ex DT de GImnasia.
Minutos más tarde, luego de que Cosachov aconsejara generarle cierto "miedo o temor" al Diez para que deje de excederse con el alcohol, Díaz resaltó que esa "solución" solo sería temporal. "El susto, y lo digo desde mi experiencia, dura dos semanas. Después, en definitiva, ya está. Más que tratar de apuntar a que te puede pasar esto y la próxima te puede pasar lo otro, en su cabeza siempre tiene más cuerda", aclara en la escucha.
En ese contexto, sostuvo que la única solución que era realizar "reuniones sistemáticas vinculares" con el ex capitán de la Selección Argentina. "Me parece que lo clave tiene que ver con esto. No solamente tener criterios unificados y plantearlos de manera independiente, sino que haya encuentros y que sienta que hay una unión acá. Y que sino, en definitiva va a ser él el que esté en otra", sostiene.
Para Díaz, a una persona que se cierra hay que soltarle la mano "porque uno no puede sostener que él haga lo que quiere y que desgaste todo". "La clave tiene que ver con esto, que vea una unión y apuntar a un norte. Si el entrena todos los días, si él no consume va a verse bien, va a estar mejor, indudablemente va a fortalecer todos sus músculos y todo va a andar mucho mejor", explica.
Finalmente el psicólogo resaltó que la operación solo les servirá dos semanas para tener alejado a Maradona de las bebidas alcohólicas y concluye: "La realidad, más allá de que haya una operación, nos sirve las primeras dos semanas, después en la práctica es algo que no sirve como motivación. O sea, no se asusta. Si se asustara no hubiera terminado así y me parece que está claro".
Tras la indagatoria del psicólogo, su abogado explicó que Díaz "manifestó que su intervención en ningún modo pudo haber influido en la muerte de Maradona en su condición de especialista en adicciones". En su indagatoria, el imputado reiteró lo que había declarado como testigo y explicó que atendía a Maradona desde un mes antes de su muerte y que solo había podido verlo en la casa de Tigre en un par de oportunidades.
En ese sentido, resaltó que el día de su muerte, el 25 de noviembre, había ido con la psiquiatra Agustina Cosachov para hacer una evaluación y, al entrar a la habitación, se habían dado cuenta de que no reaccionaba. Olmedo aseguró que Díaz lo vio a Maradona "el 26 de octubre en la ciudad de La Plata y lo notó como si estuviera alcoholizado, luego lo volvió a ver el 12 de noviembre en muy buen estado, luego el 15 de noviembre estaba impecable, el 18 fue a la casa y no lo quiso recibir, el 22 llamó para ir y le dijeron que no vaya y el 25 volvió a ir para continuar el tratamiento y lo encontraron muerto".
Según el letrado, el psicólogo además dijo que su trabajo en el tratamiento de desintoxicación "fue exitoso" porque al momento de la muerte Maradona "no tenía alcohol ni drogas" en el cuerpo. Su perito de parte había presentado un informe en disidencia a la junta médica donde afirmó que, gracias a Díaz, Maradona no consumía alcohol ni drogas al momento del deceso, que el desempeño del psicólogo no tuvo incidencia en el fallecimiento del “10” y donde avaló el criterio de no haber internado al DT de Gimnasia en una clínica respetando su voluntad.