Autos incendiados, balaceras, gente desesperada y con miedo, noticias sobre asesinatos, secuestros con amenazas de muerte y la aparición del primer prófugo: Fabricio Colon Pico. Ecuador está viviendo una pesadilla en carne propia, a tal nivel de que el presidente, Daniel Noboa, amplió el Estado de Sitio por 60 días y ordenó la intervención del sistema penitenciario por parte de las Fuerzas Armadas para enfrentarse con las bandas delictivas relacionadas al narcotráfico.
En medio del caos, el miedo, la persecución y la tensión ocurrió un hecho de terror en vivo y en directo en plena televisión. Es que un grupo armado tomó las instalaciones del canal TC en Guayaquil, para amenazar de muerte a todos los trabajadores tomándolos de rehenes con armas y elementos explosivos manifestando que "no se debe jugar con las mafias".
Durante la transmisión en vivo, uno de los criminales totalmente encapuchado se dirigió directamente a las cámaras y en tono amenazante advirtió: "Para que sepan que no se debe jugar con las mafias". Luego, obligó a los presentadores a pedir en vivo a que las fuerzas armadas se retiraran del lugar, hecho que acataron temiendo por sus vidas. Además, se escucharon disparos violentos y gritos de terror de los empleados de prensa que se encontraban dentro del canal.
Luego, la transmisión de televisión mostró a un presentador herido y la señal del canal se interrumpió completamente, dejando también a los espectadores totalmente desconcertados y atemorizados ante las imágenes que acababan de suceder.
Aquel episodio recorrió el mundo y generó una suma preocupación por todo lo sucedido. Una de las personas que fue abordadas en aquella situación, amenazado y que hasta incluso lidió con la colocación de un artefacto explosivo en el bolsillo de su saco puesto por uno de los criminales, dialogó con C5N y contó de qué manera vivió la situación.
El conductor José Luis Calderón fue una de las primeras víctimas del canal de la televisión y quien también rompió el silencio para contar la desagradable situación que le tocó afrontar. "El mensaje fue: 'Que nos vea el país'", confesó, y aseguró que lo primero que hizo que se ponga en alerta fue escuchar diversos gritos que provenían desde los pasillos del canal. Acto seguido, intentó refugiarse en un baño junto a dos compañeros pero fue encontrado por los delincuentes que lo tomaron, lo utilizaron como rehén y expusieron delante de todos.
"En mis 23 años de ejercicio periodístico nunca había experimentado algo así. Hay muchos compañeros que están deshechos", confesó y explicó cómo hizo para poder mantener la calma protegiéndose a sí mismo y a sus compañeros. "Mi reacción fue buscar sosiego y me concentré en pensar que era una situación pasajera. Por mi oficio he vivido estas situaciones como espectador, observando estos hechos para narrarlos, por lo que de cierta forma eso fue una retroalimentación".
En esa misma línea, expresó: "Mi actitud fue mantener la calma, buscar que no le hagan daño a mis compañeros que eran un manojo de nervios. El único requerimiento era que la Policía no entre o nos mataban". En relación a las fuerzas de seguridad, indicó: "Hay un gran porcentaje de los ciudadanos que aún creemos en el accionar de la Policía".
Sobre los criminales que ingresaron al canal, sostuvo: "Eran muchachos, eran chicos. La Policía detuvo a 13 personas y en ese grupo estaban dos menores de edad. Muchachos alborotados, en un estado de histeria, de emoción. Los habían enviado en un afán de generar pánico, de amedrentar. Creo que el mensaje: fue 'Que nos vea el país, estamos por encima de cualquier orden legal'".
Un joven ecuatoriano: "Está todo militarizado y no salimos de nuestras casas"
Por otro lado, en diálogo con BigBang, Esteban V, residente de Ecuador, brindó detalles en exclusiva de cómo se está viviendo el suceso en Samborondón, ciudad ubicada a sólo 14 kilómetros de distancia de Guayaquil.
"No salgo a la calle para no exponerme, trabajo remoto y ahora recién empecé clases que son también en línea. Está militarizado todo el sector público comercial, es decir todos los centros comerciales, las plazas, todos esos sectores están ahora militarizados y resguardados. Todo está funcionando con recortes y ajustes de horario. Cerca de las nueve y diez de la noche se cierran los locales, no hay pedidos de delivery y están tomando esas medidas para evitar filtraciones de terroristas o criminales que estén vinculados a los motorizados", contó.
Y destacó: "Todos los colegios y las universidades están con modalidad virtual para que nadie tenga que salir de sus casas. Incluso la gente que está vinculada en el hospital me dicen que están resguardados, también están militarizados afuera de los hospitales porque hace dos días se habían querido meter a secuestrar a los doctores y por suerte no pasó a mayores".
Apareció uno de los prófugos: "Si me garantizan la vida, me entrego"
Por otra parte, también se dio a conocer un video de uno de los prófugos más buscados de todos: Fabricio Colon Pico. El criminal, es uno de los líderes de Los Lobos en Pinchicha y es quien fue denunciado por la fiscal general, Diana Salazar, por haberla amenazado de muerte. En el momento en que se escapó de la cárcel, lo hizo con otros 38 presos de los cuales 12 fueron detenidos nuevamente.
Hoy en día es uno de los criminales más buscados en Ecuador, no sólo por haberse escapado de la cárcel sino también por considerarlo como protagonista de la feroz interna que se está realizando y que está dejando varios asesinatos en el camino. Sin embargo, el mismo Pico es quien niega formar parte y hasta en el video que preparó, manifestó no tener problema en entregarse si es que el Presidente le "garantiza" que va a seguir con vida.
"Me llamo Fabricio Colon Pico Suarez. Hoy 11 de enero hago este video para que el señor presidente lo vea y la ciudadanía. Yo no tengo nada que esconder, yo me quiero entregar, señor Presidente. Yo me fugué porque me dijeron que me iban a matar, mi vida corre peligro. No es por otro motivo. Entiéndalo, señor Presidente. Usted garantice mi vida de que no me va a pasar nada y yo me entrego, señor. Yo no tengo nada que ver en lo que se me está acusando. Le pido de favor y encarecidamente, pónganse la mano en el pecho y sea consciente de que yo no tengo nada que ver en esto. Yo no me he escondido, yo di la cara desde un principio".
Mujeres presas en una cárcel también filmaron un video pidiendo su liberación denunciando que no tienen alimentos ni bebidas. "Señor Presidente Noboa: me dirijo hacia su persona como personas privadas de la libertad, que por favor concientice ya que estamos en medio de una guerra del cual usted, presidente, nos ha puesto. Estamos sin agua, sin comida, nuestras familias sumamente preocupadas, nuestros hijos, nuestros padres, nuestros hermanos, nuestros esposos, en las calles sufriendo ya sabiendo que no estamos aquí".
Y prosiguió: "Estamos en guerra, señor Presidente. Por favor, concientice para que esto pare y nosotros podamos regresar a nuestros hogares ya que somos madres cabeza de hogar. Usted como hijo, concientice. Utsed nos ha puesto en medio de esto y necesitamos que por favor pare. Estamos en peligro. Tenga la bondad de parar esta situación. Estamos aquí pagando una sentencia, otras personas no, pero necesitamos regresar a nuestros hogares con vida".