Cinco horas de espera, enojos y polémica. El traslado de los líderes de la banda narcos rosarina Los Monos, Ariel Cantero y Jorge Emanuel Chamorro, de una cárcel de Santa Fe a Ezeiza, estuvo envuelto en un escándalo. Aunque el traslado estaba programado y los cupos estaban asegurados, aparentemente no había autoridades penitenciarias que los recibieran. Los hicieron esperar dentro del perímetro del penal.
Ariel Cantero
"Fueron llevados en la nocturnidad y sin tener el cupo de alojamiento asegurado, yo me enteré por los medios”, dijo a la prensa Carlos Varela, abogado de los narcos.
Los narcos en la camioneta de traslado del Servicio Penitenciario Federal.
Cantero y Chamorro ya están en la misma cárcel donde siguen detenidos Cristian y Martín Lanatta y Víctor Schillaci, los prófugos que conmovieron al país con una escandalosa fuga de Alvear.
La requisa en Ezeiza.
Acusaciones
"Han inventado razones para su objetivo, que era trasladarlos al Servicio Penitenciario Federal, lo que han logrado y han agravado las condiciones de detención. Han querido sacarse un problema de encima, dado lo engorroso que es custodiar a personas de extrema peligrosidad, tal como ellos mismos dicen, que requieren movimientos de muchas personas cuando son trasladados", dijo Varela, el abogado de los presuntos narcos.
Cantero, durante el juicio oral.
Varela señaló que anoche fueron trasladados desde el penal provincial de Piñero, 20 kilómetros al sudoeste de Rosario, al federal de Ezeiza, cinco integrantes de "Los Monos".
Chamorro, el otro detenido.
Según el abogado, la medida abarcó a Ariel Máximo "Guille" Cantero; a su padre, Ariel Máximo Cantero, a Emanuel Chamorro y a "un par más, cuyos nombres no recuerdo", dijo a la agencia DYN.