Un empleado de Farmacity juega a hacerle una entrevista a Gustavo Rivas. Dice representar a la "Sociedad protectora de salamines" y pregunta "¿Adónde está el salamín?" Está hablando de un código que evidentemente comparte con su entrevistado, una broma compartida. Y el abogado y eminente hombre público de Gualeguaychú, luego denunciado en la revista entrerriana Análisis por alrededor de 2000 abusos sexuales de menores, contesta que lo del salamín es "ficticio" y que fue "un invento para hacer una joda". El conductor y el entrevistado se ríen. ¿ De qué se ríen? "¿Puedo dar los nombres de los que se lo comieron?", insiste el empleado del Farmacity. "No, después cortá y te cuento", responde Rivas.
Gustavo Rivas: el "Doctor Abuso" y sus bromas sobre salamines"
Parece una estudiantina estúpida, una de esas bromas de doble sentido que los hombres suelen hacer pero que no se les ocurriría filmar. Luego de conocidas las graves acusaciones que pesan sobre Rivas, desde luego que el video adquiere otro significado. Según la revista Análisis, los abusos atribuidos a Rivas involucraron a alrededor de 2000 menores entre 1970 y 2010. Los testimonios coinciden en señalar algo así como un modus operandi: que les proyectaba pornografía, que los filmaba masturbándose, que muchos eran jóvenes que jugaban en el club de básquet que Rivas presidía.
En defensa de su cliente, el abogado de Rivas, Raúl Jurado, dijo, simplemente, "Para el amor no hay edad". El video se viralizó en las redes sociales y fue reproducido por El Día, de Gualeguaychú. Rivas sigue manteniéndose muy activo en su muro de Facebook, donde sube videos de perritos, de gatitos, y de curiosidades de la ciudad en donde vive.