Una pileta, una pareja que se abraza y se besa y más jóvenes alrededor. Ese es el centro de la imagen del video. Parece un registro de un día de verano donde un grupo de amigos se reunen para pasar un buen rato. Allí se observa lo que sucede en la escandalosa "pool party" organizada en una casona en Paraná, Entre Ríos.
Señalada, la pileta de la "pool party".
Dudas sobre el consumo de alcohol, menores de edad, y una denuncia de abuso sexual. Pese a que un vecino había denunciado ruidos molestos y la presencia de menores en situaciones extrañas, no acudió la Policía y ahora están bajo la lupa. Pero, ¿qué pasó en la fiesta?
Era una fiesta de cumpleaños, pero terminó con una denuncia de abuso por parte de una menor de edad. Hay cuatro jóvenes señalados e investigados: las identidades fueron confirmadas debido a que son mayores de edad: se trata de Pepe Ramos, hijo del propietario de la casa, Bruno Malimberni, Mariano Perretti y el menor, cuya identidad se preserva.
En el video se ve a una pareja besarse dentro de la pileta, ubicada en el patio lateral de la casona. Luego se suman otros jóvenes. Hay testigos por todos lados. Incluso una joven mira a cámara, como si hubiera descubierto que alguien está filmando lo que ocurre. Según confirmaron los presentes, todas las jóvenes son menores de edad y los varones son mayores.
La joven grita "¿Qué te pasa?"
En un momento se escucha la voz de una chica pidiendo por sus amigas. Pregunta "¿Qué te pasa?", molesta e intentando apartarse de quien filma. En ese momento, se ve que la joven está de espaldas y sin corpiño. Según las fuentes que consultó BigBang, esta adolescente es la denunciante de abuso sexual. Y por estas horas, este video es analizado por las autoridades para descifrar qué sucedió y quiénes protagonizaron el incidente.
La fiesta se organizó para celebrar un cumpleaños.
La fiscal de la Unidad de Violencia de Género, María Fernanda Ruffatti decidió imputar a los cuatro jóvenes denunciados pero según revelaron a BigBang fuentes con acceso a la declaración de la menor, no dejó en claro los hechos acontecidos.
La joven permanece en su domicilio con custodia policial desde que su madre materializó la denuncia. Sucede que al hacerlo recibieron tipos de amenazas, a su teléfono fijo y en las redes sociales.