12 Noviembre de 2021 10:33
El empresario que organizó el vuelo en el que murió el futbolista argentino Emiliano Sala en 2019 después de que se estrellara la aeronave, fue condenado este viernes a 18 meses de prisión por un tribunal de Gales.
David Henderson, el hombre acusado de organizar el vuelo que cayó y mató al futbolista Sala, había sido declarado culpable a fines de octubre por la Justicia de Reino Unido. Hoy se conoció la sentencia.
Emiliano Sala: por qué condenaron al hombre que organizó el vuelo en el que murió
Henderson fue juzgado por un tribunal de la corona de Cardiff, Gales, por "poner en peligro la seguridad" del avión en el que viajaba Emiliano Sala, que por entonces tenía 28 años. De acuerdo a la decisión judicial, el empresario coordinó el vuelo sin autorización, previo pago de 17 millones de euros por "interés económico". Este hecho "desencadenó una negligencia tras otra" que terminó con la aeronave estrellada.
Sala falleció el 21 de enero de 2019 en un accidente mientras una avioneta lo llevaba a la capital galesa para unirse al plantel del Cardiff luego de que ambos clubes alcanzaran un acuerdo por el traspaso. La caída de la aeronave sucedió en el Canal de la Mancha y el cadáver fue encontrado dos semanas después del accidente.
Tras el descubrimiento de lo sucedido, trascendió una captura de una mensaje que el deportista había enviado a un amigo, en el cual le decía que tenía miedo de que el avión se cayera.
Hace dos semanas, Henderson, de 67 años, admitió haber gestionado un vuelo para un pasajero sin permiso o autorización y este jueves fue declarado culpable en un tribunal de Cardiff, Gales. El jurado deliberó durante siete horas y media hasta alcanzar el veredicto por mayoría.
Durante las dos semanas que duró el juicio, el abogado del organizador del vuelo intentó remarcar el trauma que le generó a Henderson el accidente que terminó con la vida de Sala y el piloto a bordo del avión. “La aviación es toda su vida”, dijo Stephen Spence, letrado del ahora condenado.
Al mismo tiempo, citó la “ruina financiera”, la “reputación manchada” y los problemas de salud que se le generaron a su cliente desde aquella jornada en la que se estrelló la aeronave en el Canal de la Mancha. El letrado del principal implicado en el hecho había pedido una sentencia suspendida y servicio comunitario para su defendido.
