25 Octubre de 2021 17:15
“Me voy al río”. Esa fue la última frase que Eugenio Schneider a una de sus empleados. Después abrió el portón de su chacra a 17 kilómetros de Paysandú, Uruguay, y caminó hasta la orilla. Su objetivo era nadar, una de sus actividades favoritas. Una hora después, al notar que no regresaba, sus empleados dieron aviso a la Policía.
Varias horas después, en la noche del sábado, la Prefectura Naval Argentina encontró un cadáver flotando en el Río Uruguay, en una zona conocida como Isla Dolores, a 10 kilómetros de Concepción del Uruguay, Entre Ríos. A partir de ese momento, tras una autopsia, la Justicia le pidió a la familia del empresario para que reconocieran al cuerpo.
Finalmente, en la tarde del lunes, confirmaron que se trataba del cuerpo del empresario, dueño del frigorífico Fricasa, valuada en 35 millones de dólares. Uno de sus empleados le dijo al diario El País, de Uruguay: “Él ya no nadaba en estos días. Tuvo Covid-19 y hacía pocos días que se había recuperado totalmente. Esta incertidumbre nos deja muy mal a todos, era un hombre muy querido acá”.
Encontraron a una policía con un tiro en la cabeza, parecía un suicidio pero sospechan que el novio la mató
Según detallaron en la autopsia, la muerte se produjo por “asfixia traumática por sumersión”. Los médicos legistas de Gualeguaychú y de Concepción del Uruguay respectivamente, Marcelo Benetti y Adrián Siemens, dejaron en claro que el cuerpo no presentaba ningún signo de violencia. “Murió ahogado”, afirmaron fuentes judiciales.
Luego de encontrar el cuerpo, desde la Armada de la República Oriental del Uruguay habían afirmado a través de un comunicado: "Según la complexión física y descripción podría coincidir con la persona buscada. Fue informada la familia y el Señor Cónsul Argentino Local, a efectos de poder reconocer efectivamente el cuerpo".
"¡Me la violaron!": la madre de una nena de 11 años denunció el abuso que sufrió su hija en el baño del colegio
Además de su faceta como empresario, también era escritor y hasta había sido alumno de Jorge Luis Borges, cuando estudió Filosofía y Letras. También era un reconocido filántropo y amante del arte. A los 22 años se había ido a vivir a Chile. En 1978, se instaló en Río Negro, Uruguay.
Con la fortuna de su familia pudo comprar el Frigorífico Casa Blanca, al que rebautizó como Fricasa. En 2000, el empresario se mudó a Casa Blanca, su casa en Paysandú. En una entrevista de hace seis años, dijo: “No sé hacer cosas mediocres. Es uno de los defectos más grandes que tengo. Me entusiasmo mucho con las cosas y sigo adelante. En algunas, me ha funcionado bien y en otras, no”, afirmó el empresario en una entrevista radial brindada en 2015.