La recién nacida que había sido robada en un hospital de Tartagal, Salta, apareció en un baldío con grados de hipotermia. En el lugar no había rastro de sus captores.
Según denunció personal del hospital donde desapareció la menor, la beba habría sido robada por una pareja que le cambió una manta rosa por otra celeste, para luego huir rápidamente de allí.
Pese a que aún no hay detenidos, se especula con que abandonaron a la beba por la repercusión que tomó el caso. Incluso el Ministerio de Seguridad de la Nación ya había activado la Alerta Sofía.
La menor nació el viernes a la tarde en el Hospital Juan Domingo Perón, de Tartagal, una localidad que está ubicada a 365 kilómetros al norte de la capital salteña y a solo 50 de la frontera con Bolivia.