Este miércoles 28 de septiembre no será un día más en la vida de María Elena Delgado. Y no sólo porque se cumplen 14 años de la desaparición de su hija, sino porque espera, implora, que le permitan hacer un ADN para confirmar o descartar el caso de una chica de 17 años que, según ella, es muy parecida a Sofía Herrera.

Como mamá, Delgado espera hace mucho que aparezca una pista concreta que la lleve hasta su hija, pero en todo este tiempo, las pocas que aparecieron fueron descartadas y las incógnitas siguen siendo muchas. ¿Qué pasó con Sofía el día que desapareció en el camping? ¿Quién se la llevó? ¿Alguien la vio sola? ¿Alguien sabe lo que de verdad ocurrió y no lo dice? ¿Qué es de la vida del nómade que lo busca la Interpol y que nadie ve hace años?

Como Sofía no pudo haber desaparecido sola y por arte de magia, la Justicia y su familia están seguros de que a la niña de 3 años alguien se la llevó del camping recién inaugurado John Goodall, ubicado 59 kilómetros al sur de Río Grande. Hasta allí había llegado María Elena Delgado junto a su esposo Fabían Herrera y una pareja amiga que tenía dos hijos.

Fueron, como cualquier otro domingo, a conocer el lugar y a pasar un almuerzo bello al aire libe, pero solo en cuestión de pocos minutos todo se convirtió en un horror. Un horror que hasta el día de hoy continúa y por el que este miércoles 28 de septiembre los allegados de Sofía se reunirán para pedirle a la comunidad de Tierra del Fuego y al país entero que no se olviden de la joven que hoy ya tiene 17 años.

"Vamos a reunirnos en una plaza cerca de mi casa para recordarle a la gente que seguimos buscando a Sofi, y que nadie se olvide ella, porque a la causa hoy en día la mantiene la gente. No hay investigación, solamente se trabaja en datos cuando llegan, o sino cuando sale algo en los medios se activa de nuevo, porque la gente vuelve a recordar y surgen nuevos datos", explicó molesta Delgado.

"Lo último que se sabe es lo de José Dagoberto Díaz, ¿y hace cuántos años que se pide que se lo encuentre? Hay un pedido de Interpol, sí, pero no se lo busca. Nunca salieron a buscarlo, esperan a que lleguen datos", aseguró la mamá de Sofía en referencia a "Espanta la virgen", un hombre nómade chileno que está muy vinculado al caso porque llegó a declarar en los comienzos de la investigación que sabía lo que le había pasado a la pequeña.

De hecho, dijo que una persona que él conocía había matado a la nena cuando la atrapó supuestamente con una trampa para zorros, algo que fue descartado después. A ese testimonio no se le dio nunca importancia, ni siquiera cuando Néstor, uno de los hijos del matrimonio amigo de los padres de Herrera, aseguró ante la Justicia que había visto cómo un hombre se llevaba a la niña del camping.

Para describirlo, hizo un identikit, el cual repitió hace solo algunos años y, para sorpresa de los investigadores, esos dibujos coincidían plenamente con la cara de chileno. Así, con esos dos datos concretos en su contra, se lanzó un pedido de captura internacional contra Díaz, quien sigue siendo buscado, pero del que no hay datos concretos sobre su paradero.

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"La vi y sentí que podía ser Sofía"

Por fuera de esta pista que existe y que podría llegar a ser reveladora, la mamá de Sofía, como hizo durante años, ahora lucha por otro motivo: busca que la Justicia le permita hacer un ADN respecto de una chica de 17 años que vive en San Juan y que es muy parecida a su hija.

"Este caso se trabajó en marzo de este año, pero la familia presentó la documentación de la adopción y se lo descartó. Aún así, desde el primer momento que yo vi la foto de la nena, pedimos un ADN y no se hizo", comentó Delgado dolida.

En este sentido, dijo que se enteró de la existencia de la chica de 17 años, porque una señora le escribió por Facebook para decirle que tenía sospechas sobre la menor, y que, por su historia y la edad a la que había llegado a la casa e la familia donde vive en San Juan, tenía dudas respecto a si podría o no tratarse de Sofía Herrera.

"La señora me mandó fotos de la familia y de la nena, y obviamente esta información se la llevé a la Policía y después llegó al juzgado. Al poco tiempo, y porque fui a preguntar, me enteré que el casos se había descartado. Incluso con mi abogado habíamos pedido que se hiciera un ADN y lo rechazaron porque dijeron que la familia tiene los papeles", contó.

Lo cierto es que Delgado tiene una corazonada diferente esta vez, una muy distinta de las que pudo haber sentido durante estos 14 largos años de búsqueda. En todo este tiempo, jamás solicitó un ADN, y las únicas veces que se hicieron pruebas así, fue por pedido de la Justicia. "En 14 años, nunca pedí una ADN. No es que que ando pidiendo lo mismo siempre. Al ver la foto de la nena, la vi y sentí que puede ser Sofía", sostuvo.

Desesperada porque el tiempo sigue pasando y nadie le da respuestas, Delgado logró reunirse el jueves pasado con el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, quien le prometió que iba a hablar con las autoridades de Tierra del Fuego para poder organizar la prueba. 

El día que Sofía desapareció ante los ojos de todos

Herrera fue vista por última vez el 28 de septiembre de 2008, día en que había ido junto a sus papás y una familia amiga al camping recién inaugurado John Goodall, ubicado 59 kilómetros al sur de Río Grande. Apenas llegaron al lugar, el papá de la menor, y los hijos de la familia amiga salieron a buscar ramas para prender el fuego, y en menos de nueve minutos, la niña de 3 años y 8 meses desapareció sin dejar rastros.

Aunque ese día la buscaron por todo el predio y nadie pudo dar con ninguna pista, incluso hasta un hombre que trabajaba allí llegó a quedar detenido y luego fue liberado, lo cierto es que existe el testimonio clave de uno de los chicos que estaba junto a la nena, quien asegura en la actualidad, y también lo hizo 14 años atrás, que la menor fue sacada del camping por un hombre que se la llevó en un auto gris.

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Durante 8 meses se buscó a Sofía en base a lo que Néstor había visto, hasta que los psicólogos del Gobierno de la Nación que lo atendieron descartaron tu testimonio y dijeron que el niño mentía. Por ese entonces, los profesionales que lo trataban y sus maestras de la escuela pidieron también que no fuera sometido a más declaraciones porque el chico estaba afectado y triste ante la situación que vivía.

Sin embargo, a finales del 2017 ingresó un nuevo juez a la causa, Daniel Cesari Hernández, quien notó cosas que le llamaron la atención del expediente, y le pidió a Néstor, quien ya era mucho más grande, que volviera a declarar.

Con 18 años, el joven aseguró nuevamente que vio cómo un hombre se la llevó del predio a Sofía, y hasta hizo un identikit de la persona a la que había visto, dibujo que fue actualizado unos 10 años. Esa imagen coincide de lleno con el rostro de "Espanta la virgen".