11 Agosto de 2019 14:05
Ulises Benjamín Amaya tenía 4 años y el viernes pasado fue encontrado colgado de un puente en el municipio tucumano de Las Talitas, al noroeste de la capital provincial. En base a lo que determinó la autopsia, se cree que el nene murió asfixiado y que además estaba vivo cuando lo ataron.
Por eso mismo, la Justicia investiga el terrible hecho como un homicidio, mientras que la familia del pequeño reclama que aparezca el culpable, para que pague por lo que hizo.
El informe preliminar de la necropsia al cuerpo de Ulises Benjamín Amaya se dio a conocer la noche del viernes y arrojó como resultado que el nene “no fue violado”, pero que “estaba vivo cuando fue colgado del puente”. Aunque se aguardan otros estudios complementarios para determinar si el chiquito fue víctima de abuso, según indicó Télam, el primer resultado de la autopsia reveló que la muerte de produjo por asfixia.
En este sentido, el fiscal de Homicidios a cargo de la causa, Alejandro López Isla, descartó la posibilidad de que Amaya se haya colgado solo, y aseguró que hubo alguien que lo engaño y lo subió a la fuerza.
El niño fue enterrado este sábado por sus familiares, quienes los despidieron entre lágrimas y con mucha tristeza. "Benjamín no se iba con cualquiera. Lo llevaron engañado para ahí. No sé quién pudo haber sido, pero el que lo hizo tiene que pagar", rogó Milagros Amaya, la mamá del nene.
Durante el sepelio, los familiares y vecinos pidieron varias veces "Justicia por Benja", ya que hasta el momento no hay ningún detenido aunque sí un sospechoso señalado.
Según indicó el diario La Gaceta de Tucumán, en la despedida del niño, Amaya se mostró desconcertada, y repitió que que el culpable tiene que pagar, porque su hijo era "una criatura". Además, la mujer aseguró que una vecina vio que el niño estaba en compañía de un hombre, y que ya declaró ante la Justicia todo lo que sabía.
"Qué hizo este tipo: lo colgó y le puso los pies entre medio de las ramas para que no lo encontraran", aseguró la joven de 21 años, quien además aclaró que el puente está dentro de un terreno privado que está abandonado y descuidado, por lo que cualquiera puede ser llevado al lugar para ser atacado.
"La vecina dijo que el chico iba con un pantalón gris y una campera chorizo negra. Ella vio que (Benjamín) iba llorando, pero creía que se trataba de un familiar quien lo llevaba. Después contó que había visto al chico bajar el puente corriendo y mirando hacia todos lados", sostuvo, mientras que los allegados pidieron también que si alguien sabe algo, se comunique con la policía para aportar datos.
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El hecho ocurrió en Circunvalación y el Canal Norte, a 500 metros de la casa donde vivía el menor. El nene estaba al cuidado de su abuela, pero la mujer se distrajo unos minutos, y el chico desapareció. Para buscarlo, los abuelos salieron a la calle y con la ayuda de los vecinos comenzaron a buscar por el barrio, pero como no aparecía, la familia realizó la denuncia.Durante horas la policía lo buscó, hasta que encontraron el cadáver del nene colgado en el puente, y el horror se apoderó de todos sus familiares y vecinos.
Hasta ahora, los investigadores entrevistaron a familiares y allegados del nene, para poder determinar qué hizo cada uno al momento de la desaparición del chiquito. La carta más importante es la que tiene la vecina de la cuadra de enfrente, quien aseguró que vio que un joven llevaba a Amaya mientras lloraba y caminaban en dirección al lugar donde después apareció su cuerpo.
