En tan solo cuatro años, un kinesiólogo en la ciudad bonaerense de Lobos le facturó a PAMI una suma aproximada de 500 mil pesos por su labor en la rehabilitación de un paciente a través de la hidroterapia. Hasta ahí, una situación normal que ocurre la mayor parte del tiempo. Sin embargo, el jubilado solo por su condición tenia prohibido meterse a una pileta, sino que además asistió a solo tres jornadas durante los últimos cuatro años.
Según le explicaron a BigBang, a través de una auditoria interna realizada por la UGL VII PAMI de La Plata, el Programa de Atención Médica Integral (PAMI) descubrió que el profesional -del cual no quisieron revelar su identidad- estafó a la obra social cobrando por los servicios que no brindaba. La Unidad Fiscal de Investigación de delitos cometidos en el ámbito de actuación de PAMI (UFI-PAMI), a cargo del Dr. Javier Arzubi Calvo, investiga esta maniobra ilegal.
Según la investigación, el kinesiólogo de Lobos cobraba desde 2013 haberes por servicios que no brindaba. El profesional debía realizar hidroterapia de manera diaria a un paciente que solo asistió al natatorio tres veces en un total de más de mil días que debía durar el tratamiento.
En ese tiempo, el PAMI le abonó al especialista la suma de 490 mil pesos. La denuncia fue corroborada cuando durante la auditoría, empleados de PAMI se acercaron a las piletas donde el jubilado debía hacer el tratamiento. En ese momento se encontraba el profesional, pero no el afiliado, por lo que se investiga la supuesta connivencia de sus allegados o familiares, como así también de profesionales de la salud, ya que por el estado del beneficiario no era recomendable la hidroterapia.
La denuncia, que se realizó en el marco de una política de transparencia y lucha contra la corrupción dentro del Instituto, quedó radicada ante la Fiscalía Federal N° 2 de Lomas de Zamora, a cargo de la Dra. Cecilia Patricia Incardona.