El relato de una pequeña nena causó estupor en la comunidad educativa de la Escuela "Bethsabet Pelliza de Espinoza", situada en la localidad sanjuanina de Valle Fértil. La alumna en cuestión había denunciado haber sido manoseada por su profesor, Mario Guzmán, en pleno horario escolar.
Aquel testimonio dio pie para que una segunda nena se animara a romper el silencio y confesara que le había pasado lo mismo con el docente. Pero Guzmán no solo se había aprovechado de esas niñas, sino también de su propia sobrina: corría el mes de agosto de 2023 cuando efectivos policiales lo encontraron in fraganti abusando de la menor que tenía en ese momento 9 años, un momento de película de terror que quedará marcado para siempre en la vida de la víctima.
Desde ese día, se encuentra tras las rejas y tres meses después, a través de un juicio abreviado, se lo sentenció a 6 años y dos meses de prisión por haberse aprovechado de su poder para engañar a las estudiantes para abusarlas sexualmente. Lo llamativo de este caso es que Guzmán fue favorecido por la defensa porque podrían haberle impuesto hasta 30 años de prisión.
De hecho, el hombre de 52 años reconoció los hechos que se le imputan, admitió su culpabilidad y acordó fijar la sentencia de seis años y dos meses de prisión. Su situación, sin embargo, podría complicarse porque al investigar su celular y otros dispositivos electrónicos, las autoridades encontraron producción de material de abuso infantil de su sobrina y de otros dos menores de edad.
La comunidad de Valle Fértil respira más tranquila porque se conoció la sentencia que fue llevada adelante por el fiscal del Centro Judicial de Abordaje Integral de Niños, Niñas y Adolescentes Víctimas (ANIVI) Roberto Mallea y la ayudante fiscal Andrea Insegne. La causa está caratulada como "abuso sexual simple reiterados, abuso sexual simple agravado por ser cometido por el encargado de la educación y guardia de la víctima".
Son los mismos fiscales que llevaron adelante la causa quienes pidieron una nueva audiencia al juez de garantías Federico Rodríguez tras haber hallado el material probatorio de videos y fotos que lo explicarían en una nueva causa por producir contenido pedófilo para distribuir.
Aberrante: Guzmán abusó de su sobrina en la vía pública
Corría el mes de agosto, más precisamente el día 21. Era domingo y caía la noche oscura sobre la tranquila localidad de Valle Fértil. La Unidad Rural Nº3 de Caucete estaba en funciones en aquel momento, trabajando para brindar seguridad a la comunidad rural. Sin embargo, nunca esperaron lo que iban a presenciar.
El viento zonda soplaba como es habitual y durante una recorrida por el lugar, notaron que un auto Chevrolet Corsa estaba estacionado en medio de la oscuridad. La situación llamó poderosamente la atención de los efectivos que decidieron indagar qué estaba pasando.
Cuando encendieron la linterna para ver el interior del auto, los mismos efectivos se quedaron perplejos y estupefactos: Guzmán estaba en el asiento de atrás con actitud inquieta y sospechosa, y a su lado... había una niña. Al momento en el que los oficiales le preguntaron si estaba bien, la niña rompió en llanto y contó con sus palabras que estaba siendo abusada por su propio tío.
Desde ese momento se abrió una causa y, luego de una investigación, la Justicia estableció que el sujeto aprovechó la confianza y cercanía con la joven para cometer los abusos sexuales.El momento se puso bastante tenso porque Guzmán alegaba que era mentira y hasta se resistió al momento de ser detenido. Sin embargo, pudieron llevarlo tras las rejas y meses después comprobar que se había aprovechado de la confianza de su sobrina para cometer los abusos. Pasado el tiempo se comprobó que venía cometiendo abusos desde hacía un año atrás en reiteradas ocasiones no solo en el auto como cuando lo descubrieron sino en la mismísima casa de la niña.