El abuso de poder es una problemática que no cesa en Argentina. Luego de tres años de investigación, el Tribunal Oral Federal 1 condenó a ocho años de prisión e inhabilitación para ejercer la docencia y de cargos públicos a Luis Olmedo, un docente de la Universidad de Córdoba por haber extorsionado al menos a 50 alumnos para aprobarlos en la materia. Además, por el hecho condenaron a dos docentes y a la decana del establecimiento educativo por colaborar y encubrir el hecho. Cabe recordar que Olmedo estaba con prisión preventiva.
A raíz de diversas denuncias de los alumnos de la UNC, en el 2020 la justicia comenzó una investigación, gracias a la cual se evidenció que Olmedo obligó a sus alumnos a recurrir a su academia privada antes de rendir los exámenes, y en el caso de quienes no se inscribieron, no los aprobó.
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Gracias a los testimonios, también se constató que el profesor de Microbiología e Inmunología reprobó a quienes no aceptaron sus “condiciones” en reiteradas oportunidades. De hecho, muchos de ellos, particularmente los que se rehusaron a inscribirse, informaron que tuvieron que rendir decenas de veces la materia para poder aprobar.
Los otros dos docentes identificados como Adrián Oscar Casalis y Augusto Massimino recibieron una condena por ser colaboradores y encubridores de los abusos de poder que ejerció Olmedo para con los alumnos. Casalis recibió cinco años y seis meses de prisión, y Massimino cinco años.
Por su parte, la decana de la UNC, identificada como Mirta Spalidero de Lutri, fue condenada a un año y 10 meses de prisión en suspenso por el delito de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”. También fue habilitada por cuatro años para ocupar funciones públicas.