"Nunca jamás me pidió perdón por nada. Además, me culpaba a mí", expresó Fabiola Yañez sobre las situaciones de violencia que vivió por parte de Alberto Fernández en una entrevista con un medio español donde hizo hincapié en las actitudes del ex presidente para con el hijo que tienen en común, Francisco.
Las respuestas de la ex primera dama sobre si volvería a acercarse al ex presidente de la nación fueron contundentes en la negativa: "Es como tener la sensación de estar al lado de un abusador", reflexionó.
Además, cargó fuertemente contra el ex Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad que, bajo la conducción de Ayelén Mazzina no brindaron la atención suficiente a las situaciones de violencia que Yañez vivía, según su versión.
Sobre este punto, destrozó la gestión que compartía con Cristina Fernández de Kirchner: "Fue un gobierno que bregó en todo momento, o dio un discurso muy feminista y en contra de estas cuestiones, pero engañaron a una parte de la población porque en la práctica no era así".
Otro capítulo que tocó Yañez tiene que ver con su hijo Francisco de apenas dos años que quedó totalmente expuesto tras las denuncias que realizó OK Diario, un medio de comunicación español: "Mi ex pareja recusa a jueces y fiscales pero nunca pidió un permiso para ver a su hijo", denunció y siguió: "Que sí ha tenido tiempo para pedir la nulidad de la indagatoria y hace dos días, intentar cambiar la jurisdicción del juicio".
Según ella, "Francisco está muy bien, está perfecto. Está yendo al colegio, va a natación". Además, deslizó que Alberto consideró que "no tiene edad para ir al colegio", aunque ella rechazó fuertemente esta postura al declarar que el pequeño: "No puede estar encerrado".
Fabiola explicó que el ex presidente "le habla como si fuera un adulto" y que "está sufriendo violencia verbal y psicológica por parte de su padre".
Y, en la misma línea fustigó: "(Alberto Fernández) plantea circunstancias para que Francisco pueda prestarle atención, pero es un nene de dos años y medio que no puede prestar atención mucho más que un tiempo razonable. También ejerce violencia indirectamente hacia mí y mi mamá diciéndole (a Francisco) es 'imposible hablar con vos Francisco; espero que la próxima vez te preparen mejor y podamos hablar'".
Si bien Fabiola no desea volver a Argentina a enfrentarse con toda la situación que le generó la denuncia por violencia de género que interpuso sobre Fernández, sí explicó que quiero rehacer su vida: "Quiero actuar, que me gusta tanto, y volver a trabajar como periodista (...) e trata de rehacer un libro en blanco y escribir nuevamente. Olvidar todo este dolor que me causó (Alberto Fernández), sanar, porque fueron muchos años. Es difícil escucharlo", dijo.
Inminente declaración de Alberto Fernández
El ex presidente declarará el 19 de diciembre en la causa por violencia de género. Allí le verá al cara al juez federal Julián Ercolini en la cita que tiene para declarar a las 11 de la mañana.
Si bien la citación se había fijado para el jueves 12 de diciembre, fue la defensa de Fernández la que pidió la recusación de Ercolini con un pedido para que se suspenda la indagatoria.
La coartada presentada por Fernández fue para que Ercolini sea declarado como incompetente para trata el caso y que la causa fuera trasladada al fuero contravencional de la Justicia de la ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, esta medida no anuló la indagatoria que ahora tiene fecha y horas fijadas.
Alberto Fernández está acusado de "lesiones leves doblemente agravadas por ser cometidas mediante violencia de género y contra su entonces pareja; una lesión grave por el debilitamiento permanente de la salud de la ex primera dama -también doblemente agravada- y el delito de coacciones".
El juez Julián Ercolini fijo que la violencia de género se dio desde 2016 hasta el 6 de agosto de 2024 y también explicó que Alberto Fernández: "Ejerció distintos tipos de violencia contra su pareja, prácticamente, desde el inicio de su relación. De acuerdo a las definiciones de la ley 26.485 de Protección Integral a la Mujer, se pudo detectar violencia psicológica, física y económica". En caso de resultar culpable podría cumplir hasta 18 años de prisión.