Horror en Moreno. Las primeras conclusiones de la autopsia al cuerpo de Ludmila Pretti, la joven de 14 años asesinada el domingo pasado en la casa a la que había asistido a una reunión con amigos, sostienen que hay signos de abuso sexual. Si bien la confirmación llegará con el resultado final de las pericias, las conclusiones preeliminares van en línea con la investigación del fiscal, quien sostiene que la adolescente fue asesinada por su agresor para evitar que lo denunciara.
Por el asesinato fue detenido Cristian Adrián Jerez, quien se negó a declarar ante el fiscal de la causa, Federico Soñora, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez, por el delito de femicidio, que prevé la pena de prisión perpetua.
Fuentes judiciales y policiales informaron que el acusado fue capturado cerca de las dos de la madrugada del lunes, luego de que los investigadores detectaran actividad de su teléfono y un testigo alertara al 911 sobre su presencia en inmediaciones de las calles Arístides y Diario La Nación, de esa localidad de la zona oeste del conurbano.
El dolor del padre del Ludmila tras la detención del principal sospechoso: "Le deseo la muerte"
De acuerdo a lo publicado por el diario Crónica, "la hipótesis del abuso se sustente en que la chica tenía una lesión en la fosa ilíaca izquierda, a la altura de la pelvis, la cual sería compatible con una compresión manual que el atacante habría ejecutado con la mano derecha".
De la pericia también se desprende que la joven fue sujetada cuando todavía estaba con vida. La causa de muerte ya fue confirmada: Ludmila fue asesinada por asfixia y el mecanismo fue "estrangulamiento a lazo". Los investigadores creen que fue asesinada con su propio pañuelo.
Reconstrucción del caso
"Estoy volviendo a casa en un remise". Ese fue el último mensaje que Ludmila Pretti alcanzó a enviarle a sus padres antes de "desaparecer". Tenía 14 años y había ido el sábado a la noche con amigos a un cumpleaños. Su cuerpo fue encontrado en una bolsa debajo de una cama en la localidad de Francisco Álvarez.
Según pudo reconstruir su padre, Leandro Pretti, la joven abandonó la fiesta, pero regresó horas después al lugar. Ya no habían invitados y el dueño de la casa se convirtió así en el principal sospechoso del femicidio. Los movimientos pudieron ser reconstruidos por una aplicación de geolocalización del celular de Ludmila.
El papá de Ludmila reveló que habló cara a cara con el principal sospechoso del crimen de su hija
"El que se fugó estuvo hablando conmigo, me miró a los ojos", advirtió el papá de Ludmila, en diálogo con Semanario Actualidad. "Se fue a buscar un documento y no volvió más. Es el que estaba alquilando la casa. Se fueron todos y la nena quedó sola con él. Hay vecinos que dijeron que este tipo estaba acostumbrado a amenazar pendejas", reforzó.
Luego de chequear los movimientos del celular de la víctima, la Policía allanó la casa que Jérez alquilaba. "Por una aplicación del celular se detectó que la chica había estado en ese domicilio y se allanó de inmediato. Cuando llegamos, nos encontramos con la joven muerta".
"La data de la muerte data indica que fue entre las seis y las doce del mediodía del domingo. Aparentemente fue ahorcada, aunque esto se podrá corroborar recién con la autopsia. El estudio también permitirá saber si hubo abuso sexual", sumaron fuentes de la organización.