Se encontraron restos humanos descuartizados en una vivienda de la Villa 31 de Retiro. En un primer momento, la información que circuló al respecto fue que los restos correspondían a distintas personas y que serían al menos cinco las víctimas. BigBang confirmó con los voceros de la Policía de la Ciudad que no fue un crimen múltiple, sino un femicidio. "Se trata de un cuerpo femenino descuartizado. El marido de la víctima está desaparecido", revelaron.
Encontraron a una mujer descuartizada.
Los vecinos se contactaron con el 911 ante el insoportable olor putrefacto. Una patrulla se hizo presente cerca de las 18 del domingo. A los pocos minutos solicitaron refuerzos y se hicieron presentes numerosos efectivos de la Policía de la Ciudad y de los Bomberos del mismo distrito. Los uniformados debieron romper la puerta para ingresar en la casa 218, emplazada en la manzana 110.
La víctima fue identificada como Liliana González, de 37 años, nacida en Paraguay. Los efectivos indicaron que el principal sospechoso del femicidio es su pareja, Waldo Servian Riquelme, también paraguayo y de 33 años. El hombre fue imputado y se encuentra desaparecido desde el sábado a la tarde. Ordenaron su captura y la prohibición de salida del país.
Según se pudo reconstruir hasta el momento, mediante testimonios de vecinos y allegados a la mujer asesinada, el viernes su marido dejó a los hijos con un familiar y planeó el crimen y el método para hacerla desaparecer.
Cuando los investigadores ingresaron ayer a la vivienda se encontraron una escena simular a un película de terror. El mal olor, la sangre y partes humanas que confundían al momento de determinar la cantidad de víctimas. No fue una tarea sencilla debido a que las partes del cuerpo de la víctima se encontraban en distintas habitaciones se encontraron.
Los funcionarios recorrieron las instalaciones y descubrieron una cabeza y otros restos humanos escondidos por todo el lugar. "Había al menos una cabeza y después observaron que los pedazos de los cuerpos estaban hasta en la terraza de la casa", contaron los vecinos.
La puerta estaba trabada.
"Había al menos una cabeza y después observaron que los pedazos de los cuerpos estaban hasta en la terraza de la casa
Los habitantes del lugar mostraron su sorpresa por el episodio y admitieron que no imaginaron el lamentable descenlace. "Se venía sintiendo olor a podrido muy fuerte y cuando abrieron la puerta de la casa, fue mucho peor. Nos llamó la atención todo esto porque esta familia no se metía con nadie. En esa casa había un local también y nunca hubo problemas con nada", sumaron los vecinos en diálogo con el diario Crónica.
Por el momento, la Policía intenta confirmar los datos y obtener una fotografía del marido de la víctima para difundir el pedido de información sobre su paradero ya que desde el domingo por la mañana no fue visto en la zona y nadie sabe dónde se encuentra y hasta el momento, es principal sospechoso como autor del escalofriante femicidio.