La Justicia intenta determinar si los dos hombres hallados descuartizados en tres contenedores en la ciudad de Rosario fueron víctimas de una venganza narco, después de que se conociera un audio que un preso, acusado en una causa por tráfico de drogas, le envió a su cuñado para decirle que iba a usar una motosierra para matar a unas personas con las que tenía problemas. "Fijate cómo los voy a cortar en pedazos", dijo el sospechoso.
Los investigadores ya identificaron a las víctimas como Jorge David Giménez (29) y Víctor Martín Baralis (44), cuyos cadáveres descuartizados fueron encontrados este martes distribuidos en tres contenedores de residuos en la zona sur de la ciudad.
Según dijeron fuentes de la investigación, Giménez tenía antecedentes por drogas y Baralis por amenazas y portación ilegítima de arma de fuego, mientras que la autopsia determinó que el último había muerto a causa de un disparo en la cabeza.
El vocero de la Fiscalía Regional Rosario, Sebastián Carranza, aseguró que ambos hombres asesinados "se conocían, andaban juntos y se frecuentaban” y agregó que “se libraron actuaciones para conocer el origen de esa relación entre ambos y las posibles vinculaciones con organizaciones delictivas”.
Una de esas pistas que evalúa el fiscal del caso, Patricio Saldutti, es un audio que se difundió en una audiencia imputativa realizada ayer al jefe de la banda “Los Gorditos", un joven de 22 años llamado Brian Gabriel Bay que está preso.
El audio fue captado el 8 de octubre pasado en una causa en la que se investiga a la banda por extorsiones y amenazas, por las que recibieron $200.000 en efectivo de una víctima, a la que luego le reclamaron 400.000.
En esa escucha, Bay le dice a su cuñado Aguirre: “Escúchame de paso van a buscar el tornado y de paso matamos a un par de zombies, me voy a llevar a uno", a lo que el otro le responde: “Y, uno hay que llevarse cuñado”.
En esa conversación, Bay agrega: “No, uno me voy a llevar. Te mando un video con una motosierra, fíjate como lo voy a cortar en pedazos bien a lo mexicano, le voy a dar”.
Más adelante, desde la cárcel Coronda, Brandon Bay dijo en otro audio: "Poné los pibes en autos, me entran a buscar la moto y se llevan a uno y lo mando a cortar en pedazos, y que se vayan de la casa, le mando un video así con la motosierra ahí, pam pam, cortándolo en pedacitos que se vayan de la casa. Que se vayan todos de mi barrio”.
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Esas conversaciones se convirtieron en una pista clave tras el hallazgo de los dos cuerpos descuartizados, aunque el fiscal Saldutti ya aclaró que de todos modos “no se descarta ninguna hipótesis”.Por su parte, las hermanas del “Gordo” Bay, Aldana y Flavia, que forman parte de la banda, fueron detenidas el último sábado en el barrio Saladillo, el mismo donde ayer aparecieron los cuerpos descuartizados de Giménez y Baralis.
En la audiencia realizada este miércoles en la que fueron imputadas, los fiscales Valeria Haurigot y Pablo Socca indicaron que el jefe de la organización es el “Gordo”, quien imparte las órdenes desde la cárcel, que son ejecutadas por las dos jóvenes y su madre, Érica Altamirano, además de Aguirre y Ríos, considerado “sicario de la organización”.
Según los fiscales, esta banda criminal "procuró ocupar sectores de la ciudad de San Lorenzo y excluir de allí a otras bandas antagónicas”, lo que explica tres homicidios ocurridos este año en una disputa narco.