11 Abril de 2018 04:30
Poco más de dos meses pasaron desde que la periodista Débora Pérez Volpin muriera luego de someterse a una endoscopía en el Sanatorio La Trinidad de Palermo. Desde ese día hasta hoy las hipótesis sobre lo ocurrido durante la intervención fueron de lo más variada, aunque todas hablaban de mala praxis.
Pero hoy será el día en que finalmente se conozca la verdad. Para eso el Cuerpo Médico Forense citó a las partes intervinientes en la causa a firmar el informe de la autopsia, la cual se difundirá esta tarde.
Esta citación se dio conocer luego de que la familia de Volpin y Martín Lousteau quien preside Evolución, el partido por el que Débora fue electa como legisladora porteña, denunciaran que la causa se encontraba “paralizada”.
El informe preliminar arrojó que la periodista presentaba lesiones en el esófago y el estómago, lo que podría sugerir congestión, edema pulmonar, neumomediastino y neumoperitoneo. A pesar de todos esos indicios, la causa de la muerte no estaba clara, al igual que el grado de ingerencia en el desenlace de los profesionales intervinientes.
Resultados de los primeros estudios realizados.
Sucede que la autopsia tiene dos partes: por un lado se encuentra la inspección ocular, macroscópica, cuyas primeras conclusiones ya fueron difundidas, y en segundo término una parte microscópica que contiene el estudio de los tejidos (histopatología), análisis bioquímicos y toxicológicos, precisamente este último estudio es lo que se conocerá hoy.
Los primeros indicios apuntan contra el endoscopista y la anestesista.
El 5 de febrero la legisladora porteña se presentó en la clínica La Trinidad de Palermo porque tenía un dolor abdominal y luego de un serie de estudios previos se le indicó una endoscopía para el día siguiente. El 6 de febrero Pérez Volpin falleció mientras se le practicaba dicho procedimiento.
La causa judicial, en la que la familia acusa al endoscopista y a la anestesista, como responsables de la muerte de la periodista, se encuentra en el Juzgado Criminal y Correccional N° 57.
Renuncia
El juez criminal y correccional Gabriel Ghirlanda, quien estaba a cargo de la investigación de la muerte de Pérez Volpin, presentó ayer la renuncia al juzgado 57 que subrogaba desde hace más de un año.
La familia pidió hace un mes que se evalúen las actuaciones del juez.
La familia de la periodista había presentado hace un mes un escrito ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, donde pedía "que se evalúe la actuación del juez de Instrucción, merituando su apartamiento para garantizar la imparcialidad en estas actuaciones".
La abogada Deborah Lichtmann, que representa a Marta Lea, la madre de Débora, hizo hincapié en medidas de prueba que la querella solicitó en carácter de urgencia y a las que el magistrado no hizo lugar.
Según fuentes judiciales en su remplazo asumiría Carlos Manuel Bruniard.