Tres oficiales de la Policía de la Ciudad fueron detenidos este martes después de haber asesinado, en una supuesta defensa propia, a un hombre que intentó atacarlos en la calle Malabia al 900, en el barrio de Villa Crespo.
Según declararon dos de los tres policías, este mediodía se habían detenido en la calle a entregar una cédula de notificación judicial, cuando un auto paró detrás de ellos, y un hombre bajó de manera violenta con un cuchillo en la mano para amenazarlos.
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"El patrullero estaba detenido cuando el conductor fue repentinamente atacado con un arma blanca. El atacante estacionó detrás del móvil, bajó para acercarse y sin decir nada se abalanzó sobre el conductor", indicaron fuentes policiales.En medio del forcejeo, siempre según la versión de los policías de la comisaría comunal 15, el oficial Ramón Pérez disparó y el agresor en lugar de calmarse, volvió a atacarlos, por lo que la inspectora que estaba en el vehículo usó su arma reglamentaria, y le disparó cuatro veces al hombre de 40 años, quien murió en el lugar.
Tras el hecho, Perez fue trasladado al Hospital Churruca, donde se constató que tenía un corte leve en el brazo y fue atendido, aunque está fuera de peligro. Por su parte, se ordenó la detención de los dos policías que participaron del hecho, y de una agente que custodiaba la zona a pie, al mismo tiempo que se secuestraron todas las armas 9 milímetros para peritarlas.
Otra versión de los hechos indica que el patrullero estaba detenido en doble fila, ya que los oficiales se habían acercado a la zona para ver si la policía que custodiaba la zona necesitaba algo, y en ese entonces, mientras conversaban, un auto se detuvo detrás de ellos, y un hombre lleno de sangre se bajó con una navaja en la mano y fue directo a atacarlos, por lo que la oficial que estaba arriba del auto le disparó en defensa propia.
La causa recayó en el Juzgado Criminal y Correccional N° 49, a cargo de la magistrada Ángeles Maiorano y del fiscal Marcelo Retes, mientras que la investigación quedó en manos de la Policía Federal.
Hasta el momento se ordenó peritar los balazos que tiene el patrullero, las vainas servidas en la vereda y la sangre en el auto del fallecido, además de que se ordenó revisar las cámaras de seguridad para ver cómo fue la secuencia.