08 Enero de 2018 15:04
Nada más y nada menos que un millón de pesos fue el botín de un robo que tuvo como escenario la localidad turística de Cariló, con un supermercado como damnificado.
La Proveeduría, el supermercado damnificado.
De acuerdo a lo que relata Infobae, el lugar -llamado La Proveeduría- es, paradójicamente, propiedad del padre del secretario de Seguridad de Pinamar, Matías Yeannes.
El hecho ocurrió cerca del mediodía, cuando una camioneta Ford Ranger perteneciente a la empresa circulaba por el centro de Cariló llevando la recaudación diaria al banco.
Fue allí cuando otro vehículo (al parecer una Ford Partner) los chocó intencionalmente mientras un Peugeot 206 cortaba el paso y un Ford Focus se colocaba al costado.
Del último auto, descendió un hombre armado y le exigió a los ocupantes de la Ranger la entrega del dinero. Si bien el conductor intentó confrontarlo físicamente, se calmó al ver la pistola que portaba el ladrón.
Tarea fina
Todo indica que los asaltantes hicieron un trabajo previo de inteligencia para estudiar los movimientos de traslado de la recaudación. En ese sentido, los investigadores sospechan que los culpables no viven en la zona, pero que sí recibieron información de alguien local.
Como único indicio del crimen, el Focus utilizado por los ladrones fue hallado abandonado. Se piensa que los delincuentes le habían cambiado la patente reemplazándola por una apócrifa antes del asalto.