10 Septiembre de 2018 17:59
El crimen de Rosa Acuña ocurrió el 1° de septiembre pasado a la noche, luego de que la joven asistiera a una reunión en la casa de su comadre en la ciudad de Trelew, en la provincia de Chubut.
Aunque todavía se desconoce qué fue lo que pasó exactamente, la chica de 25 años apareció golpeada, violada y quemada en un descampado, y por el tremendo hecho, tres mujeres y un hombre quedaron detenidos en los últimos días.
Rosa Acuña fue encontrada sin vida el 1° de septiembre pasado.
Las hipótesis de lo ocurrió esa noche son muchas. Sin embargo, los investigadores sospechan que el crimen tuvo que ver con un ataque sexual.
A pesar de que todavía no hay ninguna confirmación, se cree que todo comenzó cuando algunos hombres quisieron tener relaciones sexuales con la víctima, y ella se negó. A raíz de eso, la habrían golpeado hasta desmayarla, y luego de eso, la habrían abusado sexualmente entre varios.
Después de lo ocurrido, los atacantes habrían roceado con nafta y prendido fuego a la joven cuando todavía estaba viva, y llevaron su cuerpo a un descampado para deshacerse de la evidencia.
La joven habría sido violada por varios hombres y luego prendida fuego.
El hecho ocurrió el 1 de septiembre, pero su cuerpo recién fue hallado dos días después, cuando la mamá de la joven hizo la denuncia de la desaparición. A raíz de eso, los oficiales de la policía detuvieron a la dueña de la casa donde se cometió el crimen y para el final de la semana la policía demoró a otras tres personas: un hombre y dos mujeres.
En primera instancia, quedó en prisión Laura Vargas, que además de ser la dueña de la casa es también comadre de la víctima. La sospechosa fue acusada de haber cometido un "homicidio agravado con ensañamiento", y por eso mismo la jueza Ivana González dictó la prisión preventiva para ella.
Laura Vargas es la principal sospechosa de haber cometido el crimen.
En cuanto a los otros tres aprehendidos, la fiscalía los acusó de ser partícipes necesarios, y ante el peligro de fuga, también solicitó la prisión preventiva para ellos.
En la casa de una de las detenidas los investigadores secuestraron ropa, un camisón, un bidón y otros elementos que ya fueron incorporados al expediente y que se cree, pudieron tener que ver con la noche del asesinato.
Del mismo modo, el único hombre detenido declaró ante la Justicia que aportó su auto para trasladar el cuerpo de la joven fallecida, pero que la realidad es que él no estaba en la casa donde ocurrió el crimen, sino que se presentó ahí cuando las mujeres lo llamaron para pedirle ayuda.