23 Abril de 2017 15:32
Luciano Lionel Barbeito vivía a 10 cuadras de la casa de Araceli Fulles, y desapareció el mismo día que la chica. En un principio, se asociaron los hechos y hasta se llegó a pensar que ambos ausentismos podían tener un vínculo en común. Sin embargo, las familias de los jóvenes descartan que entre ellos haya existido algún vínculo.
Araceli Fulles desapareció el primero de abril, al igual que Luciano Barbeito.
Lo cierto, es que Barbeito abandonó su hogar tres días después de haber salido de la cárcel, y la única razón que encontró su hermano, Pablo, fue que quizás se podría tratar de un ajuste de cuentas. "Mi hermano estuvo preso un año y medio por robar en un kiosco. Se hizo delincuente por sus problemas con las drogas, no es un hombre violento", agregó días atrás para Crónica.
Además, aseguró que no habían visto nada extraño en el joven de 25 años, y que por el contrario "se lo veía muy bien".
Sin embargo, luego de que la familia diera a conocer su búsqueda, Luciano se comunicó telefónicamente con su ex suegra, quien aseguró que le había dicho que "estaba bien, pero muy lejos".
Ricardo Barbeito, papá del chico, explicó: "La gente de investigaciones fue a hablar con mi ex suegra, para ver si se puede chequear el número de teléfono de dónde llamó, de qué zona llamó. Todo es muy extraño, que la haya llamado a ella y no a nosotros".
Qué dijo el hermano
Luciano apareció en el barrio de Flores, aunque no lo hizo por voluntad propia. Según afirma Crónica, personal policial de la comisaria 38° lo encontró en las esquinas de Primera Junta y Coronel Esteban Bonorino y como el joven presentó una actitud sospecha, los efectivos le pidieron su documentación y allí lo identificaron.
Luciano Barbeito fue encontrado por la policía cuando caminaba por Flores.
"Estaba dando vueltas cuando unos oficiales lo pararon en un procedimiento de rutina y le pidieron el documento; al ver que era Luciano lo llevaron a la comisaría", explicó su hermano Pablo y agregó que su padre fue a buscarlo a la dependencia policial para realizar la notificación judicial de su paradero.
Por último, Pablo afirmó que se encuentra desconcertado, pero que al menos se pudo comunicar por teléfono con él y "lo notó bien".