En los últimos días, luego de que se conociera la condena para los ocho rugbiers imputados por el asesinato de Fernand Báez Sosa, una joven reveló en su cuenta de Tik Tok que estaba "enamorada" de uno de ellos. A causa de esto, se volvió viral y los usuarios de la red social la fulminaron. Si bien esto impactó a la sociedad, hay un amplio historial de estos casos denominados bajo el ala de la "hibristofilia". Es decir, la "atracción sexual por gente peligrosa".
En términos muy generales, se trata de la tendencia a sentir atracción por personas que han cometido algún tipo de crimen, delito, tienen propensión a hacerlo o suelen estar al margen de la ley. El perito, psiquiatra y neurólogo, Enrique De Rosa Alabaster, dialogó con BigBang y desarrolló el tema en cuestión, afirmando que esto no es una enfermedad mental ni un trastorno psicológico que se padece, sino más bien algo que se desarrolla en la cabeza de las personas a raíz de los traumas que han atravesado a lo largo de sus vidas. De hecho, hay muchos casos que se han vuelto mediáticos y muy conocidos, como por ejemplo el del femicida Ricardo Barreda, quien se casó con una mujer mientras estaba preso.
Enamorarse de un asesino: los rugbiers, Barreda y el trastorno de sentir atracción por criminales
Otro ejemplo mundialmente conocido es el del fallecido estadounidense Charles Manson, que había sido condenado a cadena perpetua por haberle ordenado a los seguidores de su culto el asesinato de nueve personas hace casi medio siglo, o el del noruego Anders Behring Breivik, que cumple una sentencia de 21 años por el asesinato de 77 jóvenes en 2011 y Josef Fritzl, de Austria, encerrado de por vida desde 2008 por el encierro y violación de su propia hija durante 25 años. Durante su estancia en prisión estos y otros notorios criminales han recibido cartas de amor y hasta propuestas de matrimonio de mujeres, algunas de las cuales de verdad los admiran o los desean.
Qué es la hibristofilia y con qué traumas psicológicos está ligado
¿A qué se denomina Hibristofilia? ¿Hay distintos grados?- Hibristos, viene de hubris, de generar relaciones con personas importantes, en muchos casos la importancia tiene que ver con aspectos marginales, significativos. Que una persona sea reconocida o tenga algo diferente, se genera como que se está consiguiendo algo “difícil” o algo que pone en juego una cantidad de cosas, algo que de golpe me va sacar de mi estado de vacío existencial.
No es una enfermedad en sí misma. Es algo que va acompañado de otras cuestiones, pero tiene que ver con la estructura y la historia de cada persona. De alguna manera, es una desconexión con la realidad, pero no al nivel de lo psicótico. Hay distintos grados. Por ejemplo, el caso de Patty Hearst, quien se enamoró de su secuestrador, relata una estructura traumática. Es decir, quienes sufren algo traumático, pueden tener algo delirante.
En general, en estos casos, se destapa que las mujeres, porque en la gran mayoría de casos son mujeres, han sufrido episodios de abusos o de situaciones traumáticas que la llevan a generar sentimientos hacia esas personas.
¿La hibristofilia causa consecuencias neurológicas o psiquiátricas que dificulten o alteren a una persona?
- La hibristofilia es una condición, no es una patología, es una descripción fenomenológica de algo que pasa. Obviamente incluye la idea de alguna alteración en la estructura psíquica pero tiene que ver con la historia de esa persona. Que se yo, ayer me hablaba una paciente que me contó que fue violada por su padre, y hoy en día mantiene relaciones con sujetos de mucha mayor edad y de poder. Todo está relacionado con los traumas y las vivencias.
¿Puede la hibristofilia convertir a una persona en un asesino?
- Todos nos podemos convertir en asesinos. Una forma de protegerse de un agresor, es someterse a sus mandatos. Alguien a través de un trauma, puede convertirse en una persona muy peligrosa.
¿La persona se siente culpable o lo identifica como un padecimiento?
- Que no responda a la estadística normal no hace que lo padezcan. Es decir, son personas con una estadística psíquica normal, pero no padecen una enfermedad. El tratamiento para esto, dependerá del grado de neuroticismo o psicopatía que tenga la persona. Si tiene una identificación masiva con el agresor, no solamente no va tener culpa sino que va a tener una cuestión heroica. En general, los casos tienen que ver con que excusen totalmente los actos del asesino con la culpabilidad a la sociedad.
¿Cómo trata un profesional de la salud mental esta situación? ¿Por ejemplo, qué pasa cuando un paciente llega al consultorio y te cuenta que se enamoró de un femicida que está preso?
-Si esa persona se da cuenta de eso, y lo vive como un conflicto, es algo que se puede trabajar. Tenes un enganche por donde trabajarlo. El problema, es que alguien no lo va a vivir como una convicción. En algún punto los fenómenos de fanatismo, ya sea político, religioso, no llevan a la reflexión. Por ejemplo, yo tenía un paciente que perteneció a una secta de un pastor y lo que nosotros trabajamos es que era lo que la tenía unida a eso y como podía hacer para salir de ahí.