25 Enero de 2022 12:53
La localidad de Carcañá, en la provincia de Santa Fe, sigue revolucionada como consecuencia del femicidio de una mujer que fue asesinada de varias puñaladas en el abdomen el sábado pasado. Por su crimen se movilizó la gran mayoría del pueblo que ayer marchó para reclamar Justicia por el crimen.
La víctima, identificada como Celia Ester Acosta de 29 años, que fue encontrada sin vida el sábado. Cuando los efectivos de la policía provincial llegaron a su vivienda, alertados por varios vecinos que decían no haberla visto hace días, ingresaron y vieron el cuerpo sin vida. Las primeras diligencias arrojaron que fueron las puñaladas las que le costaron la vida pero todavía no se estableció la fecha y hora del deceso.
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El principal sospecho por estas horas es la ex pareja de Acosta, llamado Martín "Coco" Jiménez, a quien hace más de tres días que no ven por el pueblo. Ella le había pedido separarse porque estaba cansada de las palizas que le daba. Él se fue de la casa pero la hostigaba. Los investigadores sospechan que el homicidio habría sucedido el miércoles en algún momento del día. El femicidio de Celia está siendo investigado por la Agencia de Investigación Criminal de Cañada de Gómez, bajo la instrucción fiscal del Dr. Santiago Tosco, del Ministerio Público de la Acusación.
Por otra parte, su familia apunta directamente al principal sospechoso, que sigue siendo buscado intensamente por las autoridades. "Quiero que arreglen esto. Quiero justicia. Quiero que los que hicieron esto a mi hermana se entreguen”, manifestó Cristian, hermano de Celia, en declaraciones a medios locales. “Le habían dicho que le iban a dar un botón de pánico y no le habían dado nada”, agregó, luego de explicar que la joven había pedido una orden de restricción contra su ex pareja.
Un dato no menor, que fue lo que generó la furia de la familia de la víctima es que nadie de las autoridades les avisó de su muerte. Otro de sus hermanos, Ezequiel, contó que se enteraron por Facebook de la muerte de ella. “Nos enteramos por Facebook que mi hermana apareció sin vida. Quiero que atrapen al asesino vivo o muerto”, expresó.
“El muchacho tenía una restricción perimetral que no cumplió, ella venía sufriendo mucho con esa persona. Sabemos que este hombre iba a molestarla a la noche, tengo una vecina de testigo”, agregó.
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Durante la marcha de ayer, por estos motivos, hubo una serie de incidentes entre los manifestantes y la policía. Es que nadie de la fuerza de seguridad salió a “dar la cara” como denunciaron no sólo los familiares sino también los colectivos feministas que acompañaron el reclamo.
“Empezamos la marcha desde la plaza de las Mujeres y llegamos hasta la jefatura para obtener respuestas. Esperamos que alguien de la comisaría salga a dar la cara”, señaló en declaraciones al diario El Litoral una de las referentes del Colectivo Feminista Carcarañá que pidió no ser identificada. Esto desencadenó la furia de los manifestantes que arrojaron botellas y piedras contra la comisaría.
