Horror en Venezuela. Una joven de doce años murió asesinada por su propia madre, quien le tapó la nariz y la boca para que no gritara mientras su pareja actual la violaba y la terminó asfixiando.
Todo sucedió en la comunidad de Maturín, en el estado de Moncada el pasado seis de febrero en horas de la madrugada. De acuerdo al parte policial, la pareja llevó a la adolescente al Hospital Dr. Manuel Núñez Tovar e intentó cubrir el crimen: aseguraron que la menor había sufrido un ataque cardíaco.
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Por las marcas que la joven presentaba en el cuerpo, los médicos decidieron dar inmediato aviso a las autoridades. Luego, las pericias forenses confirmaron no sólo la violación, sino también la muerte por asfixia mecánica; lo que aceleró la detención de ambos.
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De acuerdo a lo consignado por el diario Crónica, una fuente de la investigación precisó que el padrastro sometió a la menor y que la madre "sin sentimiento de culpa" lo ayudó tapándole la boca y la nariz a su propia hija.