Rocío Molina, de 19 años, fue hallada asesinada en la localidad de San Andrés, en Tucumán. Había recibido cinco puñaladas en la espalda.
El momento en el que el cuerpo es trasladado (Foto: La Gaceta).
Se cree que la víctima fue atacada en otro lugar y el cadáver trasladado a la zona de monte donde fue encontrado. En la cercanía, se hallaron huellas que corresponderían a una motocicleta y signos de arrastre del cuerpo.
Macabro hallazgo
La joven fue hallada por Ángel Rojas, un vecino que inmediatamente le dio aviso a su padre, William. "El rostro estaba tapado con yuyos, al parecer, recién cortados", le relató el hombre a La Gaceta de Tucumán.
Los vecinos se reunieron en la zona del hallazgo.
Los Rojas dieron aviso a dos policías que circulaban en un patrullero a unas cuadras del lugar del hallazgo y el cadáver, después de ser trasladado, fue sometido a análisis de huelas dactilares.
Mientras se efectuaban estas diligencias, una mujer de 36 años se presentó ante la Policía llevando el DNI de su hija desaparecida y describiendo sus características físicas. Fue así que, finalmente, pudieron identificar a Rocío como la víctima.