por Agustin Gulman
12 Junio de 2017 14:41
Fueron dos balas que, disparadas con seis meses de diferencia, provocaron la reapertura de un debate que parece eterno. La muerte de Brian Aguinaco, horas antes de la última Nochebuena, y de Agustín Bustamante, la semana pasada, tuvieron un punto en común: en ambas detuvieron y acusaron a menores de edad.
El crimen de Agustín, el nene de 3 años que fue baleado en Lomas de Zamora cuando acompañaba a su papá a buscar una pizza, reabrió una discusión que parecía pausada por la propia decisión del Gobierno: la baja en la edad de imputabilidad de los 16 a los 14 años. La vicepresidenta, Gabriela Michetti, pidió “dar el debate”, aunque el jefe de la Policía Bonaerense, Fabián Perroni, lo rechazó.
El Ministerio de Justicia enviará el proyecto al Congreso antes del receso invernal.
Lo cierto es que tanto al interior del Gobierno como en la sociedad civil el debate es amplio. Desde el Ministerio de Justicia que conduce Germán Garavano detallaron a BigBang que apuntan a dar la discusión este año, y que inclusive llegaría al Congreso antes del receso invernal. Sin embargo, en un año electoral en el que hubo menos de diez sesiones, muchos dudan que pueda tratarse.
El ministro cree que es necesaria una reforma del Régimen Penal Juvenil porque la actual norma tiene 37 años. “Queremos la mejor ley posible, con estándares internacionales, que sea integral y que contemple a los delitos tenues y a los más graves”, indican cerca de Garavano.
El ex juez de la Corte criticó con dureza el proyecto: "Habrá más futuros delincuentes".
Consultado por BigBang, el ex juez de la Corte, Raúl Eugenio Zaffaroni, analizó que, de concretarse la baja, ocurrirá "lo mismo que sucedió cuando lo hizo la dictadura y ella misma tuvo que volver atrás". En esta línea, expresó que "los pibes de 14 años son adolescentes y no hay posibilidad alguna de que sean mayores". "No se trata de inteligencia, sino de madurez afectiva. Habrá más pibes presos, más futuros delincuentes", agregó.
La reforma del Régimen Penal Juvenil no sería para todos los menores por igual. La reducción en la edad de imputabilidad de 16 a 14 sería para los delitos más graves. Para otros hechos delictivos se piensan alternativas más vinculadas con la reinserción. En la cartera de Justicia creen que es necesario trabajar con los menores en el caso de los delitos más leves, pero que pueden “ser una alarma”.
"Habrá más pibes presos, más futuros delincuentes
Para Roberto Cipriano García, de la Comisión Provincial por la Memoria, es mentira que la Justicia no detenga a los menores de 16 años, y detalló que sólo en Buenos Aires hay alrededor de 620 chicos en conflicto con la ley penal. “Entre un tres y un cinco por ciento son delitos graves cometidos por menores de 16 años”, señaló a BigBang. Incluso, en el propio Gobierno reconocen que los casos donde intervienen menores de 16 no son demasiados.
El objetivo del Gobierno es tratar el proyecto en el Congreso durante 2017.
Zaffaroni coincide con esa mirada y asegura que "el porcentaje de los homicidios cometidos por pibes de entre 14 y 16 años es ínfimo y no tiene significación". "Desde los 16 son punibles en delitos graves. Esto es pura publicidad, fabricarán nuevos delincuentes. Quizás los necesiten para justificar la represión de un modelo de sociedad excluyente que no cierra sin represión. De todas formas, no es por este medio que lo van a conseguir", agregó el ex juez de la Corte.
Según Zaffaroni, si se reduce la edad de imputabilidad "el servicio penitenciario no sabrá cómo manejarse, al igual que pasó en la dictadura". "Habrá más pibes violados, en fin, un nuevo desastre hasta que se dé de nuevo marcha atrás", señala el ex juez.
García criticó el proyecto para reducir la edad de imputabilidad y señaló que sería “intentar apagar el fuego con nafta”. “Nos preocupa el dolor de las víctimas, lo que planteamos es que para resolver los problemas de la sociedad el camino no es aplicar más violencia”.
La vicepresidenta Gabriela Michetti pidió dar el debate por la baja en la edad de imputabilidad.
“Pensar una reforma estructural al sistema penal basado en hechos resonantes nos parece que n ova a tener buen resultado, todo lo contrario: la experiencia indica que en los últimos 20 años el sistema se viene endureciendo, prevalecieron las políticas de mano dura”, apuntó García.
En el Gobierno creen que es necesario una reforma en el régimen penal juvenil para que los adolescentes que cometen delitos puedan tener un debido proceso judicial. “Hoy no tienen una ley que contemple cuáles son los procesos. El juez dicta y define lo que le parece, no hay jurisprudencia, es muy arbitrario”, dicen.
El abogado Claudio Mazaira, que durante largos años trabajó con Madres del Dolor, asegura que es necesario reducir las edades para los delitos más graves, aunque aclara que la cárcel “no mejora al delincuente”. “La baja en la edad tiene que ser acompañada por otras patas del Estado, como la educación, pero también teniendo cárceles más sanas”.
Zaffaroni volvió a rechazar la iniciativa de reducir la edad en la imputabilidad de menores.
Por eso, Mazaira cree que es necesario cambiar la facultad de los tribunales de menores, que ante muchos casos definen dejar la pena en suspenso y quedan en libertad. “Sería una medida que ayudaría. Hoy un chico de 13 o 14 años tiene la misma viveza o calle que hace algunos años tenía uno de 16”, apunta.
Incluso, el abogado recuerda el caso de dos niños de 8 y 6 años que fueron condenados por el homicidio de un pequeño de cuatro años, ocurrido en Inglaterra. “Demostraron que los dos chiquitos sabían qué hacían. Yo no quiero llegar a eso, pero sí un examen psiquiátrico dice que el niño está preparado para delinquir, para mí tiene que cumplir la pena, obviamente en un instituto adecuado, no en una prisión”.
