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Insólito error y dudas: lo condenaron a "perpetua" y cuatro horas después le cambiaron la pena

El órgano judicial acusó un “error material” en el fallo y se rectificó en una nueva resolución cuatro horas más tarde. 

16 Junio de 2023 10:49
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Pasó un año y medio del asesinato a sangre fría de René Mendoza Parra, el referente social acribillado de catorce tiros en La Matanza en noviembre de 2021. Hace pocos días, la Justicia dio a conocer la sentencia contra su homicida, Kevin Sergio Leonel Maza, pero en la resolución, que leyó él Tribunal Oral Criminal Nº3, se lo condenó a cadena perpetua. Sin embargo, apenas horas más tarde, los funcionarios reconocieron que hubo un “error” y le redujeron la pena a 18 años de prisión.

Maza no solo fue juzgado por el crimen de Parra, sino también por el intento de asesinato de su hijo, René Mendoza Callejas. En el marco del proceso en su contra, fue precisamente este último quien lo reconoció, situación que sumada a otra serie de pruebas motivó al fiscal del caso, Carlos Luppino, a solicitar la cadena perpetua.

El fallo se conoció el miércoles: los jueces  Matías Mariano Deane, Raúl Fernando Elhart y Gerardo Clemente Gayol decidieron “imponer a Kevin Sergio Leonel Maza, la pena de prisión perpetua, accesorias legales y costas, por resultar coautor y autor, respectivamente, material y penalmente responsable de los delitos de homicidio simple, homicidio calificado criminis causa en grado de tentativa y tenencia ilegal de arma de guerra, todos ellos en concurso material entre sí”.

Cuando de la boca del juez salió la palabra "perpetua", la decisión fue plenamente celebrada por los familiares de la víctima de 78 años, quienes consideraron que “se hizo justicia” y se aplicó “una condena ejemplar para mostrar que matar no es barato”. Pero la alegría les duró apenas un puñado de horas, porque más tarde el tribunal los contactó para informarles que se había cometido un “error” en la lectura y que la pena correspondiente para Maza era otra y mucho menor. 

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“Tal como surge de los presentes obrados, los suscriptos dictaron veredicto y sentencia en el marco de la presente, consignando por error material tanto en la segunda cuestión de la misma como en el punto I de la parte dispositiva, que condenaba a Kevin Sergio Leonel Maza a la pena de prisión perpetua, accesorias legales y costas del proceso”, indicaron los magistrados en un nuevo fallo que rectificó el primero.

"Al momento de proceder a la lectura del fallo se ha advertido un error material que debe ser debidamente aclarado. En efecto, siendo que de la lectura íntegra del fallo en mención surge a las claras que el hecho por el cual se condenara a Maza fue encuadrado en las figuras de homicidio simple, homicidio calificado criminis causa en grado de tentativa y tenencia ilegal de arma de guerra, todos ellos en concurso material entre sí (...) es que corresponde rectificar el monto de la pena consignada, que a todas luces no se corresponde con aquellos fundamentos ni encuadre y cita legal invocados”, agregaron. 

De esta forma, el tribunal entendió que la pena correspondiente para el asesino de Mendoza es de 18 años de prisión por resultar “coautor y autor, respectivamente, material y penalmente responsable de los delitos de homicidio simple, homicidio calificado criminis causa en grado de tentativa y tenencia ilegal de arma de guerra”.

El crimen de René Mendoza Parra

Era 7 de noviembre de 2021, paradójicamente el mismo día en que en La Matanza era asesinado el kiosquero Roberto Sabo en un intento de robo. Ell referente social René Mendoza Parra había mantenido una reunión con autoridades bolivianas sobre los problemas de inseguridad en la zona.

Era de noche cuando en el barrio de Villa Dorrego, dos jóvenes habían llamado a la puerta y pidieron por él. “Mi papá salió, cerró la puerta y enseguida se escuchan los tiros. Salí, me apuntaron y continuaron disparando. Lo seguían haciendo, sin parar en ningún momento”, relató por entonces René, su hijo. Unos 14 tiros recibió el hombre. Varios en los brazos, en el pecho: lo acribillaron sin piedad. “Lo veía morir...”, rememoró su familiar. Para el hijo la reunión sobre seguridad tuvo que tener una conexión con su asesinato.