María Laura Alfaro, la fiscal de Lomas de Zamora que investiga el homicidio doloso de Ayelén Roldán advirtió que sigue cinco líneas de investigación y que, al momento, lo único que pudo confirmarse es que la joven embarazada de 19 años no se quitó la vida, sino que un tercero fue quien la asesinó.
Ayelén tenía 19 años y estaba embarazada de seis meses.
"Estamos investigando un homicidio. La realidad es que es un caso que presentó varias hipótesis desde un inicio. Desde nuestro rol de fiscales una vez que llegamos a la escena del crimen podemos encontrarnos con varios panoramas muy diferentes. Muchas veces llegamos y el caso es claro, este es un caso confuso", advirtió en declaraciones a radio La Red.
Según Alfaro, están en curso cinco líneas de investigación. "No puedo descartar nada. Sería imprudente, cuando el caso no es claro, solamente seguir una línea de investigación. Son varias las hipótesis que se están manejando", explicó, aunque reconoció: "Está claro de que se trata de un homicidio. Fue una muerte dolosa".
La fiscal ya le tomó declaración testimonial a los principales sospechosos.
Los resultados periciales ordenados por la fiscalía arrojaron datos llamativos. En principio, las heridas cortantes que presentaba el novio de la joven, Ariel Vallett, en su espalda llamaron la atención de los investigación. "La pareja es uno de los posibles autores, aunque todavía no hay ningún imputado. Se dispuso un reconocimiento médico y tenía marcas en la espalda. Él alegó que se había rascado, pero tenía las uñas cortas. No es determinante, pero es un dato".
Vecinos quemaron en la madrugada los autos apostados en la puerta de la fiscalía.
Las pesquisas médicas también fueron solicitadas para el matrimonio que había contratado a la joven como niñera. "Hay muchas personas que corroboran las prácticas sexuales y no se puede descartar de que lo hayan hecho en el marco de un contexto sexual", precisó la fiscal, y sumó: "No descartamos tampoco la hipótesis del robo porque los dueños de la casa sostienen que faltaron cosas dentro del domicilio".
Pero esta es, tal vez, una de las hipótesis más endebles. "No se constató que las cerraduras hayan sido forzadas. Si existió un robo, la persona ingresó al domicilio con el consentimiento de la víctima".
Ariel, el novio de la víctima, bajo la lupa de la Justicia por las heridas que tiene en la espalda.
Alfaro, en tanto, descartó por completo la hipótesis del suicidio. "Surge de los resultados periciales. El médico que intervino explicó que el surco que tiene en el cuello es horizontal. Por eso lo desestimamos, porque la marca de un suicidio es vertical. Además, se suma que en el lugar del hecho encontramos distintos tipos de cables, pero estaban todos lejos del cadáver".
Fuente: La Red