Se cumple el primer aniversario del homicidio de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años asesinado a golpes a la salida de un boliche de la ciudad balnearia de Villa Gesell. Por el crimen hay ocho detenidos que aguardan en la Alcaldía 3 del penal de Melchor Romero la elevación a juicio de la causa en la que están imputados por "homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas". Cómo sigue la causa, por qué podría complicarse la situación de Alejo Milanesi (uno de los rugbiers que recuperó en febrero del año pasado la libertad junto a Juan Pedro Guarino) y qué sucederá con el joven identificado como el "número once".
"La causa en este momento se trasladó a la defensa por el pedido de elevación a juicio que hizo la fiscal y que nosotros acompañamos", explica a BigBang Fabián Améndola, uno de los abogados del estudio de Fernando Burlando que representa a la familia de la víctima. "La fiscal pidió que se eleve a juicio a los ocho detenidos, pero nosotros sumamos en el pedido a Milanesi que está en libertad", aclaró el letrado, al tiempo que reconoció: "Con respecto a Guarino, acompañamos el pedido de sobreseimiento que realizó la fiscalía".
Si bien ambos jóvenes aparecen en las imágenes de las cámaras de seguridad antes, durante y en el festejo que realizaron después de la golpiza, la fiscal Verónica Zamboni no encontró elementos de prueba para sostener la imputación a Milanesi. "No se puede descartar su participación", sostiene la defensa de los Báez Sosa, al tiempo que recuerda que al momento de su detención -sólo horas después del asesinato- su cuerpo presentaba "escoriaciones lineales en tres dedos de la mano derecha y en la zona dorsal, lesiones compatibles con arañazos".
¿Cómo seguirá la causa? "Lo más lógico es que se eleve a juicio porque no hay elementos de prueba para pedir un sobreseimiento, por lo menos en lo que respecta a los ocho detenidos. La defensa tiene que contestar estos pedidos y será el juez de garantía el que resuelva si se eleva o no y a cuántos", explica Améndola. "Lo que se va a discutir es la participación de Milanesi, porque la fiscalía pidió el sobreseimiento y nosotros queremos que vaya a juicio", suma.
Los mensajes borrados de los rugbiers y la confirmación: "Hay al menos dos involucrados más"
Semanas después del crimen, luego del peritaje de las imágenes de las cámaras de seguridad y de las declaraciones de los testigos, mucho se especuló en torno al denominado "rugbier número 11", identificado como Tomás Collazo. Ese será otro de los desafíos de la defensa de los Báez Sosa. "Pedimos que antes de la elevación a juicio se amplíe la investigación y se resuelva la situación del que sería el 'número once', que ya fue identificado. La idea es evitar que el día de mañana haya que llevar adelante otro juicio por una persona. Estamos pidiendo que se resuelva ahora su situación".
Si bien durante la etapa de instrucción el abogado de los imputados, Hubo Tomei, dejó filtrar a los medios que solicitarían un eventual juicio por jurado; lo cierto es que en las últimas horas la defensa de los rugbiers optará luego de la feria judicial por un juicio tradicional ante un tribunal oral, más "beneficioso". "El escarnio social y la cobertura mediática que se le dio al caso hizo casi imposible pedir un juicio por jurado, que es más permeable a la condena mediática y menos riguroso en términos legales", reconocieron desde el entorno de los imputados."Hay que esperar a que la defensa conteste, porque ahí vamos a saber el tipo de juicio al que vamos a enfrentar. Por ahora, es un juicio por jurado, pero está dentro de la facultad de la defensa renunciar a ese tipo de juicio y querer ser juzgado por un tribunal colegiado de jueces", explica Améndola.
Los papás de Fernando, a un año del crimen: "Recién ahora tomaron conciencia del camino que les espera"
Mientras aguardan el fin de la feria, los padres de Fernando participaron de distintos actos en homenaje a su hijo y fueron recibidos por el presidente Alberto Fernández en Casa Rosada. "Fue un encuentro bueno, en el que pudieron contarle cómo vivieron y transitaron este año que con el agravante de la pandemia fue mucho peor. Le pidieron Justicia y el presidente se comprometió con la causa y les dio todo su apoyo. Se puso a disposición para todo lo que necesitaran", cuenta a BigBang Matías Bagnato, uno de los presentes durante la audiencia.
"Ellos están muy ansiosos con el juicio, pero también están asustados. Al hablar conmigo y con tras víctimas empiezan a tomar conciencia del camino que les espera de acá en adelante; que no se termina todo con el juicio. Por momentos tienen la sensación de no saber por qué siguen viviendo. Silvino me decía: 'A veces me pregunto por qué trabajo'. Sienten que sin Fernando se acabó todo. Empezaron a trabajar hace poco. Si bien tienen esa sensación, se están dando cuenta de que trabajar les está haciendo bien porque es un motivo por el cual levantarse de la cama y enfrentar el día. Lo mismo Graciela".
Tanto Silvino como Graciela son acompañados por Bagnato y muchos de los referentes que impulsaron la Ley de víctimas. "El motivo de la reunión con el presidente fue el aniversario y los padres de Fernando me pidieron que los acompañara, pero elegí no salir en la foto, ni hablar con los medios. Durante el encuentro se habló mucho sobre la situación que atravesamos los familiares de víctimas y el presidente se comprometió a que esta semana vamos a organizar una reunión con el Observatorio de Víctimas para empezar a tener una agenda".
El colectivo acompaña desde su experiencia a los padres de Fernando en el día a día. "Están en una montaña rusa de emociones. Por momentos están un poquito más enteros, después completamente desbastados. Es entendible dentro de lo que significa el primer año: las primeras Fiestas sin Fernando, las primeras fechas, cumpleaños y un montón de situaciones que enfrentamos los familiares de víctimas; el tener que convivir con el dolor y las ausencias".