Zoe tenía 4 años y su cuerpo fue descubierto por la Policía de La Rioja, completamente calcinado, en el fondo de una casa del barrio Loteo San Andrés. El hecho ocurrió el pasado domingo, cerca de las 9 de la mañana. Los efectivos llegaron al domicilio alertados por el macabro hallazgo: la pequeña estaba en el fondo de la vivienda donde residía al lado de una moto completamente incendiada.
En el lugar, solo se encontraban la madre de la menor, de 22 años y quien ese momento estaba en medio de una crisis nerviosa, y algunos curiosos vecinos observando la situación. La mujer fue detenida junto a otras tres personas, entre ellas el dueño de la moto que apareció incendiada junto al cadáver, por orden la jueza Jésica Díaz Marano, titular del juzgado de Instrucción de Violencia de Género y Protección Integral 1 de La Rioja.
Por ahora, la magistrada deberá resolver si le imputa una participación en el crimen o algún tipo de encubrimiento. Con respecto a los otros detenidos, si bien se desconocen las identidades, las fuentes de la investigación aseguraron que uno de los hombres es un pastor evangélico, dueño de la moto que se hallaba incendiada junto al cadáver de la pequeña en el terreno ubicado en la avenida Ortiz de Ocampo y la calle 7 del barrio frente al predio del club Estudiantes.
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Tras el hallazgo del cuerpo de Zoe, la jueza Díaz Marano ordenó la realización de distintas diligencias de rigor, como la recolección de evidencia, secuestro de elementos de interés para la causa y levantamiento de muestras para su peritaje. También pidió que una trabajadora del Cuerpo Asesor Técnico Interdisciplinario (CATI) acuda al barrio con el propósito de llevar a cabo una intervención socio-vecinal para obtener datos que fueran necesarios para la investigación.
Al mismo tiempo, la magistrada decretó el secreto de sumario y ya convocó al Cuerpo Médico Forense para la autopsia, resguardándose muestras para un posterior cotejo de perfil genético. Los investigadores sostienen como hipótesis judicial que la madre de la nena “no estaría diciendo todo lo que sabe o que habría participado del crimen”. Con el avance de las tareas investigativas, la jueza ordenó la detención de un hombre y una mujer y el allanamiento de sus domicilios.
Allí se secuestraron varios elementos de interés para la causa y luego fueron detenidos el pastor evangélico y finalmente la madre de la niña. Luego de que se conociera la impactante muerte de Zoe, distintas organizaciones feministas y las Madres del Dolor realizaron una movilización pacífica pidiendo justicia. “No queremos que sientan que obstaculizamos o que somos una piedra en el camino". dijo Marisa Semeraro, una de las impulsoras de la marcha.
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Y agregó: "Este es un acto abrazador y contenedor para la familia y para la sociedad toda, porque nos ha desgarrado completamente. Va a ser una marcha pacífica, con presencia de organizaciones como 'Ni una menos La Rioja', 'Socorro Rosa', 'Marea Verde' y 'Madres del Dolor'”. A su vez, los abuelos paternos de Zoe apuntaron contra la madre y aseguraron que “la abandonó a los seis meses”.
Durante ese tiempo -remarcaron- fueron ellos los que estuvieron a cargo de su crianza y señalaron que la mujer tenía graves problemas de consumo de sustancias. “Mi hija tiene 22 años, muy joven tuvo a su hija y estuvo un tiempo con el padre de ella, lo que puedo decir es que es una buena madre, que siempre llevaba a su hija a donde iba. Pero lo que ella hacía de su vida en la calle no puedo decir nada y si tiene la culpa de lo que pasó que pague, queremos que se haga justicia", sentenció el abuelo materno de la víctima. La madre de Zoe será imputada en los próximos días por la muerte de su hija o por encubrimiento.