Luego de recibir el informe preliminar de la autopsia de Alicia Sánchez, la joven de 25 años que murió al caer al hueco de un ascensor en Pinamar, el fiscal de la causa, Juan Pablo Calderón, consideró que no se trató de un femicidio, aunque imputó a dos hombres por la muerte de la Martillera y Corredora Pública.
De la autopsia se desprendió que la joven falleció producto de las múltiples lesiones que sufrió al impactar contra el ascensor, que se encontraba varios pisos más abajo. Además, también se confirmó que luego de que Alicia cayera, alguien llamó al ascensor, lo que le generó más lesiones a la joven que agonizó por algunos minutos sin que nadie supiera en dónde estaba.
Si bien el cráneo no presentó facturas, sí se constataron que los traumatismos le causaron múltiples coágulos. También tenía golpes en el tórax y en el abdomen, de acuerdo a lo consignado por el portal Infobae, los que le generaron un paro cardio respiratorio y un shock hipovolémico.
Al momento, la causa es investigada como "homicidio culposo" y el fiscal solicitó la imputación del técnico del ascensor que había realizado el chequeo técnico hacía tan sólo quince días y al encargado del edificio, ubicado sobre la calle Constitución.
"El último chequeo técnico del ascensor fue hace quince días y estaba todo ok. Además, durante esa revisión se cambiaron las puertas. Pasaron de las antiguas y clásicas tijera a estas plegables, un poco más modernas. Pero de todas formas siguieron siendo manuales", revelaron al mencionado portal fuentes de la causa.
Se espera que en las próximas horas se avance con la pericia mecánica y las pericias toxicológicas para determinar si la joven había consumido alcohol u otras sustancias. "Si bien no se descartan otras hipótesis, por el momento no hay ninguna evidencia de que haya habido un tercero en el lugar cuando Alicia se acercó al ascensor".