09 Abril de 2020 19:27
El caso de Florencia Magalí Morales, la joven oriunda de Mendoza que fue encontrada sin vida dentro de una de las celdas de la comisaría 25 de la localidad de Santa Rosa del Conlara, San Luis, comenzó a cobrar mayor importancia en las últimas horas.
La mujer de 39 años fue detenida el domingo cuando iba en bicicleta por las calles de Santa Rosa del Conlara, la localidad del noreste de la provincia San Luis a la que se había mudado. El parte detalló que la mujer no hizo caso a la voz de alto, por lo que fue detenida y llevada a la comisaría.
Morales se identificó, pero alegó que no llevaba consigo el documento, aunque sí aportó su número de DNI, con terminación impar. Este último dato es importante debido a que el Gobierno de San Luis dispuso que la circulación sea por la terminación par o impar del documento: y el domingo les tocaba a los pares, por lo que quedó detenida por violar el aislamiento.
Una vez detenida en la comisaría, y de acuerdo al parte oficial, los guardias encontraron el cuerpo de Morales sin vida dentro de la celda: tenía “asido a su cuello un cordón (posiblemente de la capucha del buzo que vestía) atado al otro extremo de la bisagra superior de la puerta enteriza de madera de la celda”, detallaron los guardias que estaban en vigilancia.
En ese sentido -señala- los guardias intentaron reanimarla, mientras buscaban “ayuda en el nosocomio local”.
Según las fuentes policiales, Morales estaba bajo tratamiento psicológico: se había separado de su violento ex marido y tenía una hija procesada en junio del año pasado, sospechada de haber asesinado a su hija (nieta de Morales).
"Mi hermana fue asesinada", señaló Andrea Morales, hermana de la víctima, en las redes sociales. Mientras tanto, Asuntos Internos de la Policía de San Luis investiga al personal de guardia, que cumplía funciones ese trágico domingo.
Debido al revuelo que originó este caso, la oficina de prensa del Poder Judicial publicó un texto referido al hecho.
El texto del Poder judicial publicado anoche ahonda en algunos detalles del procedimiento policial, dando a conocer, por ejemplo, el nombre de los policías que intervinieron en la detención, uno de los cuales fue rasguñado por Morales. También explica que, una vez hallado el cuerpo, la celda y el cadáver fueron revisados por el médico forense Gustavo Lafourcade.
Este último hecho se hizo en presencia del criminalista Eduardo Alonso, de Valentín Fornisari, el secretario en turno del Juzgado Multifuero de Santa Rosa, del subjefe de la Unidad Regional III, comisario Jorge Bustos, y de personal de la División Criminalística de dicha unidad.
El informe también detalla que fue agregado al expediente el resultado de la autopsia: “Causa inmediata de la muerte: fallecimiento por asfixia mecánica. Data de muerte: tiempo inferior a las tres horas”.
Sin embargo, no hay detalle del elemento empleado para el ahorcamiento, que -según los guardias- fue un cordón que Morales obtuvo de la capucha de su buzo.
Tampoco hay registros de si el cuerpo tenía evidencia de otras lesiones, derivadas, quizá, del forcejeo con los efectivos que la detuvieron. El cuerpo de Morales, se informó, fue entregado a familiares el mismo lunes.
De esta manera, el juzgado a cargo del juez Jorge Pinto espera los resultados de los análisis toxicológicos que le practicó el Laboratorio de Policía Científica de la Jefatura Central de la Policía de San Luis a varias muestras de tejido y fluidos de la víctima.