Más
Policiales

La defensa del cura acusado de abuso sexual en Reconquista: "Le preguntaba a Dios por qué vivía esta injusticia"

El juicio contra Néstor Monzón comenzó este jueves, y durante la primera audiencia el imputado sostuvo su inocencia.

05 Diciembre de 2019 16:05
monzon

Luego de cuatro años de una espera interminable, este jueves comenzó en Reconquista el juicio contra el sacerdote Néstor Monzón, acusado de haber abusado sexualmente de dos chicos menores de edad que eran cercanos a la parroquia donde él daba misa.

Con dos horas de retraso, y en medio de un gran operativo de seguridad, el debate oral contra el cura empezó con los alegatos de apertura, que fueron públicos a pedido de la defensa. Ante el tribunal presidido por los jueces Claudia Bressan (presidenta), Santiago Banegas y Martín Gauna Chapero, el fiscal Alejandro Rodríguez pidió una pena de 12 años de prisión efectiva para Monzón por haber cometido el delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por producir un grave daño en la salud y por ser ministro de un culto religioso reconocido en perjuicio de una niña; y por abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la condición de ser un ministro de un culto religioso reconocido en perjuicio de un niño.

Por su parte, las querellas solicitaron 16 años de cárcel, mientras que la defensa del imputado, a cargo de Ricardo Degoumis, fue por la absolución. Luego de esto, el Tribunal le concedió la palabra a Monzón, quien aprovechó los minutos para declararse inocente y para acusar a los padres de los niños de mentirosos.

"Como todos saben yo estuve pocas semanas en la parroquia, llegué el 15 de septiembre de 2015, y antes había estado 6 años trabajando en la localidad de Romang. Voy a cumplir 25 años de sacerdocio, distintos Obispos me fueron acompañando, fui capellán de la Brigada, del Hospital, Caritas, di clases en el Roberto Zuviria", dijo al principio de su relato, y luego agregó que no entendía por qué tenía que vivir esta injusticia, si él no había abusado a nadie.

"Le preguntaba a Dios porqué tenía que vivir esta injusticia, si me amenazaban de muerte por haber defendido los derechos de los trabajadores de Romang lo entendería, pero esta injusticia no, pensé que podría ir preso por eso, no por abusar de niños. Yo no abusé, no violé, no dañé la integridad de esos niños, soy inocente", sostuvo.

Además, agregó que cree que lo acusan por el simple hecho de ser sacerdote, y que las familias de las víctimas no midieron el daño moral y psicológico que le hicieron a sus padres, hermanos y sobrinos al acusarlo sin pruebas.

"Ellos no respetaron la dignidad de los niños, hacían conferencias contando todo, querían tener un cura preso. Le pido a Dios que toda esta causa sirva para sanear a la justicia, nunca me negué a la justicia que estaba investigando, siempre estuve a derecho”, cerró.

Lee más. Empieza en Santa Fe el juicio contra un cura acusado de abusar un nene de un año y una nena de 3

Finalizada la etapa de alegatos, el Tribunal y las partes se trasladaron al domicilio de los abuelos de las víctimas para una constatación, la cual fue solicitada por el abogado defensor del cura. La vivienda, esta ubicada en Barrio Hospital de Reconquista y linda con la Parroquia "María Madre de Dios", en la cual Monzón era el párroco a cargo al momento de cometidos los hechos que se le imputaron y por lo cuales hoy es juzgado.

Las víctimas son dos niños menores de edad, tenían 1 y 3 años durante los hechos, y según se comprobó durante la instrucción de la causa, fueron abusados a finales de noviembre de 2015 por el sacerdote en una casa que pertenece a la Diócesis de Reconquista, dentro de la Parroquia María Madre de Dios, donde vivía el imputado.

A raíz de esto, la denuncia contra el religioso fue realizada casi un mes después por la madre de la pequeña, y desde ese momento Monzón cumplió durante 60 días una prisión preventiva, hasta que finalmente quedó en libertad. La mamá de la pequeña contó que el sacerdote le contagió HVP cuando la abusó, y que además también agredió sexualmente al primo de la pequeña, que es la otra víctima que lo denunció cuando el caso ya había salido a la luz.

Durante el proceso declararán cerca de 50 testigos, entre los que se encuentran familiares y profesionales de la Salud, por lo que se prevé que los alegatos de cierre se conozcan el viernes 13 de diciembre y que el fallo judicial se revele el martes 17 de diciembre próximo.