07 Enero de 2018 09:53
Lo intuyó. Lo presintió. Como muchas mujeres que sufren violencia de género, Mariela Noguera sabía que su vida corría peligro y escribió una carta a su hija en caso de que le “llegara a pasar algo”. Lo que nunca imaginó es que su ex también terminaría con la vida de Aylén Tamara en el quíntuple crimen que fue bautizado como “la masacre de Santa Fe”.
Mariela junto a los dos hijos que tuvo con Facundo Solís, su femicida.
Mariela había decidido terminar hace más de un año su relación con Facundo Solís, un policía de 33 años. Con él había tenido dos hijos, uno de diez y otro de cinco años. Pero Solís nunca soportó la idea de la separación, pese a que la Justicia le había puesto una medida perimetral luego de que su ex lo denunciara por violencia de género.
La dolorosa carta de despedida que le dejó a su hija mayor.
Dos meses atrás, la relación se había tornado aún más violenta y Mariela decidió escribirle una carta a su hija mayor. “Sean felices, vivan, vivan. Disfruten y ámense. Y que tus hermanos sean personas de bien, sé que los vas a cuidar y a guiar. Perdoname por todo”, es el primer párrafo. “Si me llegara a pasar algo, por favor cuidá de tus hermanos”, sumó.
Solís, un policía de 33 años, permanece detenido e imputado por el quíntuple crimen.
Las dos cartas fueron escritas por Mariela el viernes 3 de noviembre de 2017. Fue después de que su ex se hiciera presente en la casa y ella se negara a abrirle. “Cuida a Joel (novio de Aylén y otra de las víctimas de Solís), que es súper bueno y jamás permitas que nadie te falte el respeto, ningún hombre”.
Mariela tenía una medida cautelar que le impedía a Solís acercarse.
Sesenta días pasaron desde aquellas premonitorias líneas hasta que Solís ingresó el viernes 29 de diciembre a la vivienda que compartía con su ex hasta separarse. Lo primero que hizo fue dispararle a Yoel Airaldi y a Aylén Tamara Soto (hija de su ex). “A los dos los atacó con disparos de arma de fuego y les quitó la vida”.
Los vecinos reclaman justicia.
Luego, atacó a su ex pareja y le disparó dos veces en la cabeza. “Se trató de una agresión hecha en un contexto de violencia de género, en una clara situación de subordinación de quien fuera su pareja, basado en una relación desigual de poder caracterizada por el empleo de violencia física y psicológica”, advirtieron los fiscales de la causa.
El baño de sangre no culminó ahí. “Instantes después, ingresó a una vivienda contigua en la que le disparó en la cabeza a quien era su ex suegra, una mujer identificada como Generosa del Carmen Loseco”. Y, por último, fue hasta la casa de su la hermana de Mariela, identificada como Sonia Isabel Noguera. Allí, le disparó en la cara al hijo de Sonia, pero el adolescente de 17 años logró sobrevivir. Luego, le disparó a su ex cuñada y la mató delante de su hijo.
Solís permanece detenido e imputado como autor de un femicidio, cuatro femicidios vinculados y una tentativa de femicidio vinculado.