Eugenio Veppo permanece detenido e imputado por homicidio simple con dolo eventual después de haber atropellado y asesinado a Cinthia Choque, la agente de tránsito de 28 años que se encontraba realizando un control de alcoholemia el domingo por la madrugada en Figueroa Alcorta y Tagle. Santiago Sciciliano, de treinta, permanece internado con graves heridas.
El periodista prestó declaración en el Juzgado N°13, después de pasar la noche en una comisaría de la Policía de la Ciudad. Lo hizo en compañía de su abogado, José Luis Ferrari. En las últimas horas fue trasladado al penal de Ezeiza. Tras su testimonio, la carátula inicial de “homicidio culposo” -con una expectativa de pena de hasta cinco años de prisión- pasó a ser la de “homicidio con dolo eventual”, con una pena de hasta 25 años de cárcel.
La declaración de Eugenio Veppo, el periodista que atropelló y mató a una agente de tránsito
“Venía conduciendo el auto y no tenía visibilidad cuando me abro del auto que tenía adelante y de costado sentí un poco el impacto, pero seguí manejando de los nervios, aunque no sabía a dónde manejaba”, confirmó el periodista de 32 años. En efecto, fue el reconocimiento de ese “algo” y la aclaración de que no había detenido la marcha por “los nervios” lo que derivó en el cambio de carátula.Leé también | Periodista y empleado en un Ministerio: Eugenio Veppo, el hombre que mató a la agente de tránsito
Según su testimonio, luego de atropellar a los dos agentes de tránsito, Veppo continuó marcha. “Entré en estado de shock porque había chocado con 'algo' y me bajé del auto frente al Hospital Fernández. Cuando freno, no estaba en mis posibilidades para manejar (Sic)”, precisó el imputado, de acuerdo al acta de declaración a la que tuvo acceso el diario La Nación.
En efecto, tal como reconstruyen las cámaras de seguridad, siguió por Figueroa Alcorta, luego dobló en San Martín de Tours; tomó Libertador y después Coronel Díaz. Abandonó el Volkswagen Passat azul en la calle Silvio Ruggeri al 2800. Eran las seis de la mañana y estaba acompañado por un amigo.
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Cuando le preguntaron si no atinó a parar para ver qué era ese “algo” con lo que había chocado, Veppo se llamó a silencio. Ese fue el momento en el que su abogado decidió suspender la audiencia y le transmitió a la jueza que su cliente no iba a responder preguntas. “Él embiste sin saber qué es lo que embiste, pero sabiendo que embiste”, justificó el letrado ante los medios, luego de la suspensión de la indagatoria.