Después de mucho dolor, sufrimiento y estrés, una joven de 23 años se animó en enero pasado a hacer una denuncia pública en las redes sociales, que luego ratificó ante la Justicia, contra cinco jóvenes que la abusaron sexualmente el 22 de septiembre de 2012 en una casa del balneario Playa Unión, en Rawson, a donde ella había ido con sus amigas para pasar un buen rato en una fiesta por el comienzo de la primavera.

Aunque durante bastante tiempo la chica no se animó a hablar, logró a comienzos de este año mostrar las caras de quienes la atacaron, lo que derivó en que se comenzara una causa judicial contra los acusados, la cual formalmente se abrirá este viernes a la mañana en la Oficina Judicial de Rawson con una audiencia de apertura de la investigación.

A pesar de que hasta ahora los cinco jóvenes señalados no están imputados, en las próximas horas el fiscal Fernando Rivarola les notificará que están acusados de haber cometido el delito de "abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante". En un principio la denunciante, que tenía 16 años en el momento del violento hecho, mencionó a seis chicos como implicados en el ataque, pero luego uno de ellos declaró como arrepentido, lo que alivió su situación y lo deja fuera de un posible proceso.

Al momento del abuso, dos de los chicos tenían 21 años, otro 18, y el resto 17. Todos forman parte de familias muy conocidas e influyentes de la provincia, tanto en el ámbito político y empresarial como en el deportivo. Incluso uno de ellos se recibió de abogado y vive en la provincia de Buenos Aires, otro es jugador de squash y corredor de karting, mientras que el resto son hijos de importantes empresarios y están ligados a la política de Chubut.

Aunque los detalles de la causa son privados y permanecen bajo reserva porque la víctima fue abusada cuando era menor, con ayuda del grupo de mujeres “Las Magdalenas”, a principios de 2019 la denunciante se animó a hacer público un extenso descargo bajo el título "La manada de Chubut" en el que contó cómo ocurrieron los hechos y las posteriores amenazas que sufrió de parte de los acusados.

En concreto, la chica explicó que sufrió el abuso en una casa ubicada frente al balneario Playa Unión, a donde había ido junto a sus amigas desde Puerto Madryn para participar de una fiesta privada por el comienzo de la Primavera.

"Al poco tiempo de llegar perdí la consciencia, y es ahí cuando una de mis amigas me encontró en una habitación siendo abusada por un grupo de 4 varones, mientras otro era testigo, y el sexto sostenía la puerta, evitando que entre alguien o que yo pudiera salir", explicó la víctima al comienzo de su relato, quien además agregó que sus amigas la encontraron totalmente desnuda, y que tuvieron que buscar la ropa por la habitación a oscuras.

"En ese momento el dueño de la casa echó a todo el mundo de la fiesta, al grito de que no cuenten nada", aseguró, y en su texto público, aclaró que después del hecho intentó suicidarse, hasta que se animó a contarle a sus papás lo que le había pasado, y que así pudo ser asistida.

Lo que no paró con el paso del tiempo, fue la insistencia y la amenaza constante de alguno de los acusados para que la joven se callara y no hiciera la denuncia. Aunque por el hostigamiento que recibió tuvo que mudarse a otra ciudad junto a su madre, finalmente la chica pudo juntar fuerzas para salir adelante, y así, de una vez por todas, denunció ante la Justicia lo que vivió.

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La causa está a cargo del fiscal Rivarola, quien este viernes a la mañana se presentará en la Oficina Judicial de Rawson para dar comienzo a la audiencia (que será privada) de apertura de la investigación en la cual los cinco jóvenes serán imputados por el delito de "abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante", lo que les dará el derecho de empezar con su defensa.