19 Enero de 2017 16:23
Detrás de una serie de casos de abuso infantil revelados en La Plata se encuentra la oscura figura de Martín Pérez, un profesor de inglés que ofrecía clases particulares a niños y adultos en su hogar.
La personalidad de Pérez presenta varias aristas oscuras.
Luego de cuatro denuncias y una investigación de dos meses, se allanó su casa y se descubrió una gran cantidad de material fotográfico y fílmico que documenta los hechos.
De 50 años de edad, Pérez está casado y tiene un hijo. Posee también una Licenciatura en Literatura obtenida en la Universidad de La Plata.
Pérez al momento de ser detenido en su hogar.
"Nos tomó por sorpresa a todos. No correspondía con la que persona que aparentaba ser", le confesó a Infobae el padre de una de las víctimas del profesor. "Hay mucha gente que lo conoce y no puede creer que se trate de alguien así. Era una persona extremadamente agradable. Tenía buena onda, pero incluso más buena onda de lo normal".
Perversidad y obsesión
De acuerdo a uno de los investigadores del caso, "en los encuentros el profesor colocaba música y abrazaba a los niños hasta entrar en confianza y luego, a medida que pasaba el tiempo, llegaba a tocar sus genitales, entre otros abusos" agregando que "además de los nenes también lograba la confianza de los padres de las víctimas".
El profesor estaba obsesionado por la obra "Alicia en el País de las Maravillas".
La misma fuente también indicó que Pérez "exhibía a sus alumnos imágenes sobre representaciones de la ficción Alicia en el país de las Maravillas donde el dibujo de la niña mantenía relaciones sexuales con otro personaje".
De hecho, el acusado tenía una particular fijación con el libro escrito por Lewis Carroll y llegó a coleccionar centenares de objetos relacionados con la obra.
Uno de los objetos de su colección que Pérez mostró en La Nación.
"En la adolescencia empecé a juntar diferentes versiones. Me atrapaba el lenguaje, quería ver las distintas traducciones", relató en una entrevista que le realizó el diario platense El Día recordando el aniversario 150 de Alicia en el País de las Maravillas. "Después me empecé a interesar en las ilustraciones. Entonces de 20 libros pasé a tener 50, de 50, 100, y así seguí sumando".
El acusado utilizaba a Alicia en el País de las Maravillas como excusa para acercarse a sus víctimas.
Pérez también fue consultado por La Nación en una nota sobre coleccionistas de memorabilia del libro. Allí, decía utilizar en redes sociales el alias Cheshire Cat Catrroll, un juego de palabras entre el nombre del gato de Cheshire (personaje de la historia) y el apellido del autor.
"Mi colección se fue formando de a poco", relataba. "Tengo filatelia, medallas, pines, publicidades, postales, tarjetas, cartas, figuras y estatuillas. Ahora la colección ocupa una habitación de mi casa".
Pérez le mostraba a sus víctimas dibujos pornográficos.
En su perfil de Facebook, además, Pérez compartía algunas de las imágenes de niñas que el propio Carroll tomó en el siglo XIX. Vale recordar que el escritor inglés fue sospechado de pedofilia de la mano de su costumbre de pasar tiempo acompañado de menores de edad y fotografiarlas.