Es un lugar común, repetido, sobretodo, por los taxistas. “Acá no va nadie preso”. “Entran por una puerta y salen por otra”. Pues bien, no es cierto señores. En las cárceles de todo el país hay cada vez más presos y el 74 por ciento de los alojados en las prisiones no tienen condenas firmes.
Los datos son oficiales y surgen de las estadísticas del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, que comenzó a divulgar las estadísticas criminales, luego de que durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner se hubiera resuelto discontinuar su publicación.
El gobierno de CFK no proporcionaba datos.
El argumento para que se dejaran de publicar era que como las estadísticas no eran favorables a la gestión -es decir, los delitos aumentaban en lugar de bajar- era mejor que no se conocieran. Un despropósito.
La nueva gestión del ministro Germán Garavano resolvió terminar con esa incongruencia y desde hoy se comenzaron a publicar los datos estadísticos de los delitos en los últimos años. La última actualización disponible corresponde a 2014.
Esas estadísticas muestran que la cantidad de detenidos en las cárceles de todo el país se incrementó en un 132 por ciento entre 1997 y 2014. Se pasó de 29.690 detenidos en 1997 a 69.060 detenidos en las prisiones de todo el país: en las que pertenecen al Servicio Penitenciario Federal y en las de los servicios penitenciarios de todas las provincias.
La tasa de personas privadas de libertad fue en 2014 de 161,85 cada 100 mil habitantes. “En el 48% de los casos se trataba de detenidos con condena, mientras que un 51% estaban procesados con prisión preventiva y un 1% eran inimputables o contraventores”, dice un informe oficial.
La mayor parte de los detenidos están imputados de robos, hurtos, y tentativas de esos delitos, seguido luego por acusados de de homicidios dolosos. En tercer lugar se concentran los detenidos vinculados con la ley que reprime el tráfico y venta de estupefacientes.
La tasa de detenidos en relación con la población en la Argentina, no se encuentra ni entre las más alta, ni entre las más bajas. El tope lo encabezan los Estados Unidos con una tasa de 698 presos, cada 100 mil habitantes. Según los datos disponibles, el último lugar esa escala lo ocupa la India con 33 detenidos cada 100 mil habitantes.
Un dato relevante de la población carcelaria es los detenidos procesados y los que ya cuentan con condena. La relación se incrementó en los casos que se tramitan en la justicia federal de las personas procesadas sin condena: se pasó del 63 por ciento en 2002, al 74% en 2014. En cambio, en las justicia provinciales ocurrió lo contrario en 2002 el 59 % de los detenidos no tenían condena y en 2014 se bajó a un 48 por ciento.
#PolíticaCriminal | Crecimiento de la población carcelaria: https://t.co/9WWTVYdXJJ Informe completo: @jusgobar pic.twitter.com/OX1Tvw00cB
- Infojus Noticias (@InfojusNoticias)
Otro dato estadístico que no es menor: el 63 por ciento de los detenidos en las prisiones de todo el país tienen entre 18 y 34 años. Es decir, son hombres y mujeres jóvenes que buscaron una salida en la delincuencia.