Este lunes se llevó a cabo una marcha frente al Hospital Mi Pueblo, de Florencio Varela, en reclamo de justicia por Braian Sebastián Figueredo, de 23 años, quien se encuentra en estado de coma después de haber recibido una brutal golpiza y sus familiares denuncian que es víctima de abandono de persona por parte de los profesionales que lo atienden en ese nosocomio, ya que le encontraron “queresa de moscas” en la boca, y por Patricia Torres, de 46 años, quien falleció el 18 de diciembre por circunstancias que sus hijos aún intentan esclarecer en la Justicia.
BigBang dialogó con Jonatán, hijo de Torres, quien le explicó a este portal que su mamá había sido trasladada el 4 de diciembre al hospital Mi Pueblo porque tenía 22 de presión, le faltaba el aire y empezó a sufrir un principio de arritmia. “Ella subió por sus medios a la ambulancia y le pusieron una mascarilla. En todo momento le dijeron que se recostara, pero ella les decía a los médicos que se asfixiaba y quería ir sentada. Pero ellos insistieron con acostarla”, contó.
Según detalló, al llegar al Hospital los “dejaron en la sala espera” por media hora gracias a la burocracia del lugar. “Pero como mi mamá comenzó a decir que le faltaba el aire, le pusieron otra mascarilla con oxígeno. Pero ella hacía señas de que del tubo no salía nada”, contó.
Pero lo peor ocurriría minutos después. Su mamá fue llevada por los médicos, quienes al regresar le contaron a su hermana que la habían inducido al coma. “La indujeron al coma porque dijeron que tenía un edema agudo pulmonar, que se le llenaron de líquido los pulmones”, detalló.
Según le contó Jonatán a este sitio, a él y a sus otros dos hermanos nunca les pidieron el consentimiento o simplemente les avisaron de que la iban a inducir al coma: “No nos avisaron siquiera. Pasaron los días y mi mamá se iba deteriorando, dicho por los médicos”.
En esa línea, el hombre le explicó a BigBang que su mamá estuvo internada, en estado de coma, durante siete días en una sala de guardia, donde era atendida por un médico de guardia: “Después la pasaron a terapia intensiva. Ahí nos dijeron que mejoraba poco, pero que mejoraba”.
“Todo eso lo tenemos grabado. Al día siguiente de decirnos que mejoraba, nos dijeron que ellos nunca hablaron de una ´mejora´ y que la realidad fue empeorando el cuadro, complicándole así todos órganos”.
“El director nunca nos quiso atender. Siempre nos atendieron socios directivos, un tal Luciano Nápoles. Nosotros pedimos la derivación y nos decían que no había camas en el Hospital El Cruce, pero fuimos ahí, preguntamos y nos dijeron que desde Mi Pueblo nunca hicieron el pedido formal de traslado. Nos estaban boludeando”, añadió, con mucho enojo.
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Tal y como le ocurrió a Braian, los hijos de Patricia Torres notaron que la mujer sufría iguales condiciones de abandono y poca higiene. “Mi hermano notó el 17 de diciembre al mediodía que a mi mamá algo le salía en la nariz. Se lo quiso sacar y vio que se movían. Eran gusanos, larvas. Él se lo reclamó a las enfermeras, ahí lo sacaron y le dijeron que espere afuera”, relató.
Según Jonatán, tanto su hermano como otros dos parientes que estaban esperando poder ver a Torres no pudieron acceder a la habitación hasta muy entrado en la tarde. “Yo llegue a la tarde, le reclame al médico y nos dijo que mi madre tenía eso porque ella entró con piojos. A ella también se le estaba formando escaras a pesar de que nosotros le compramos el aerosol”, denunció.
En ese sentido, resaltó que los médicos “no le ponían” el aerosol contra las ampollas de la piel que se le formaban a causa de estar recostada en la camilla. “Ella estaba tapada completamente salvo la cabeza. Mi señora la revisaba y veía que en las piernas se le formaba escaras y que ya tenía la piel en carne viva”, resaltó el hijo de la mujer que falleció finalmente un día después.
El 18 de diciembre, después de estar dos semanas internadas, Patricia Torres falleció según los médicos de una “falla multiorgánica”. “La atendieron 12 médicos diferentes. A mi tío le avisaron que había fallecido y cuando llegó, ella ya no estaba en la cama. No esperaron que llegara algún familiar para quitarle los aparatos y sacarla de ahí”, agregó.
Y continuó: “Nos dijeron que falleció de un problema multiorgánico. Después le dijeron a mi tío que le habían hecho un estudio y que le habían encontrado un tumor cerca del corazón y en la cabeza. Pero eso nos lo dijeron después de que falleciera”. La familia denunció por “abandono de persona” y “mala praxis” al Hospital Mi pueblo en la Comisaría la 1ra de Florencio Valera.
Según relataron, a raíz de la denuncia le hicieron la autopsia a la mujer diez días después de su fallecimiento. “Fuimos a pedir la historia clínica y todavía no nos la dieron. Seguramente la van a falsificar”, concluyó Jonatán, con mucha preocupación y tristeza.