25 Julio de 2017 14:24
El 22 de abril, una joven esperaba el colectivos 107 en la esquina de Beiró y Cervantes, en Villa Devoto. Un auto Renault Clio bordó, con algunas partes despintadas, frenó a su lado. "No te voy a violar, solo te voy a sacar unas fotos", le dijo el conductor con su cara oculta por una media negra tipo can-can en su cara. La apuntó con un arma y la obligó a subir al auto.
El momento de la detención.
No había testigos a la vista. La joven accedió. Una vez dentro del vehículo se mantuvo quieta y con el arma presionándole la sien. El hombre le colocó unos lentes para soldadura y luego inició la marcha.
La joven sintió que llegaba a una autopista. Luego de unos minutos, el auto se detuvo. El hombre la bajó y la llevó a una casa. Allí fue violada. Según consta en la declaración de la joven, fue obligada a modelar distintas piezas de lencería y fotografiada con ellas. El hombre la retuvo cinco horas y la violó reiterada veces. Al terminar, se cambió y le ofreció llevarla hasta Capital Federal.
De la misma manera, con los ojos tapados y amenazándola, la subió al auto y la dejó en Flores, cerca de la casa de su abuela. Al bajar del auto, la víctima buscó una remisería y volvió a su casa. Al llegar, llamó a una amiga y realizó la denuncia.
LA DETENCIÓN DEL VIOLADOR
Este sábado por la madrugada, la división Delitos contra la Salud de la Policía de la Ciudad arrestó al hombre acusado de ser el violador de la máscara. Tras la investigación realizada por la fiscal Cristina Caamaño y gracias a la denuncia de esta joven se logró ubicar a este agresor, identificado con las iniciales J.L.L.
El violador es un remisero de 61 años.
Es un remisero de 61 años, que trabajaba en una agencia de Morón. Fue detenido en Ituzaingó, en una casa que alquilaba sobre la calle Saldán.
La joven describió al agresor como un hombre "morrudo, de estatura mediana, tez clara, con poco vello en el pecho". Otras dos víctimas del mismo violador, que lograron escapar por sus medios, habían denunciado cómo fueron los ataques que sufrieron. Una de ellas había logrado retener la patente del auto y logró sumar ese dato. Las víctimas lograron identificarlo mediante fotos debido a que la rueda de reconocimiento que se iba a realizar ayer fue cancelada.
Entre la información recabada una vez que fue detenido, trascendió que J.L.L había estado 15 años en la cárcel. Este remisero salió del penal de Marcos Paz en noviembre del año pasado. Allí asistió a un programa de rehabilitación, luego de ser condenado en 2001 por causas por "robo" y exposición indecente".