Renzo Godoy tenía cuatro años y fue brutalmente asesinado a golpes en su casa, ubicada en el partido bonaerense de Berazategui. Por el hecho fueron detenidos su madre y la pareja de ella, quienes al principio le habían asegurado a las autoridades que la víctima se había caído accidentalmente en la bañera. Ambos se negaron a declarar ante la Justicia y quedaron formalmente detenidos por el filicidio.
El hecho ocurrió el jueves pasado, en una casa ubicada en la calle 508 entre 616 y 617, en la localidad de El Pato. De acuerdo a la primera versión que dio Victoria Godoy, de 30 años, al llevar al pequeño Renzo al hospital es que su hijo se encontraba dentro de una bañera y, en un descuido mientras atendía a su bebé, el hermanito de Renzo, el nene se resbaló y se golpeó fuertemente la cabeza provocando su automático desmayo.
Godoy lo tomó en brazos y lo llevó gravemente herido a la Unidad Sanitaria 11 de El Pato, adonde finalmente ingresó fallecido con múltiples hematomas en distintas partes del cuerpo. A raíz de ello, el personal de salud alertó de lo ocurrido a la comisaría 5ta. de Berazategui y posteriormente se dio intervención a la fiscal Gabriela Mateos, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 descentralizada de esa jurisdicción.
La fiscal Mateos dispuso que se realizara la necropsia al cuerpo del niño, cuyo resultado arrojó que falleció como consecuencia de los reiterados golpes, mientras que la médica autopsiante aseguró que los hematomas que presentaba Renzo "jamás pudieron haber sido ocasionadas por una caída en la bañera". Por esta razón, la funcionaria judicial cambió la calificación legal del hecho de “averiguación causales de muerte” a “homicidio agravado por el vínculo”.
Además, dispuso la detención de la madre y del padrastro del nene, que también se encontraba en la vivienda al momento del hecho. La fiscal Mateos los indagó y ambos se negaron a declarar, tras lo cual quedaron formalmente detenidos. Mientras tanto, los vecinos del lugar incendiaron la casa de los imputados luego de enterarse del crimen del niño.
Daniela, tía de Renzo, se volcó a las redes sociales para expresar su dolor, contó por el calvario que tuvo que atravesar el nene de 4 años y reveló que su hermano, el papá biológico del menor, había denunciado esto en varias oportunidades sin obtener ninguna respuesta por parte de las autoridades. “Esta basura hace más de un año no dejaba que mi hermano vea a sus hijos. Desde que se puso en pareja con este hijo de pu... ", detalló.
Y siguió: "Antes venía y traía a los cuatro chicos (incluyendo a uno que no es de mi hermano y aun así lo queremos como uno más) y se los dejaba a mi mamá diciendo 'no los soporto, fíjense ustedes'. Cuando se juntó con ese hdp no los dejó venir nunca más, no nos dejaba que lo lleváramos a pasear, a buscar, no dejaba que compartieran los cumpleaños con nosotros, con sus primos, nada".
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Según Daniela, cuando iban a ver a los nenes -cuando Godoy se los permitía- "siempre tenia que estar él, los nenes sentados, no los dejaba que nos abracen, parecían soldados". "Mi mamá denunció, mi hermano denunció, el jardín la citó porque el nene iba golpeado (a nosotros nunca nos avisaron porque no tenia el apellido de mi hermano), mi hermano puso abogado, leyes de mier... Nunca se puede hacer nada, siempre hay que esperar que pase lo peor”, resaltó.Fue a la madrugada cuando Daniela y la familia paterna de Renzo se enteraron de la trágica muerte del nene de cuatro años. "Esta madrugada nos avisan que, según ella, el nene se ahogó bañándose. A otros les dijo que se golpeó en la ducha. La autopsia reveló que fue golpeado. Quedaron detenidos por homicidio. Se van a pudrir en la cárcel espero, pero, ¿quién nos devuelve a Renzito? Cuatro años, no se pudo ni defender de estos monstruos", denunció.
Y sentenció: "¿Qué mal puede hacer una criatura?. No lo puedo entender, no lo voy a entender jamás. Renzo era un nene sano, dulce, cariñoso, con una sonrisa enorme, que amaba a sus hermanos. Y ahora estamos acá velándolo con su carita golpeada. Ya no lo voy a poder ver más, ya no voy a volver a escuchar sus kiaaaa (tia), no me va a volver a abrazar. Perdón, perdón mi amor por no poder sacarte de ahí a tiempo, perdón por tu sufrimiento bebé. Te amo y te voy a extrañar el resto de mis días hasta volver a encontrarnos. Estos cobardes la van a pagar”,