Desde la Unidad Penal Nº 6 de Paraná, donde se encuentra presa luego de ser condenada a prisión perpetua por el asesinato de Fernando Pastorizzo, Nahir Galarza habló por primera vez con la prensa y ahondó en una de las principales estrategias de su defensa: que el agravante por vínculo no le correspondía ya que no mantenía una relación de noviazgo con la víctima.
Galarza fue trasladada a la Unidad Penal N° 6 el lunes.
"Una de las cosas que me molestan es que se diga que Fernando era mi novio", expresó en diálogo con la web entrerriana Ahora. "Me molesta porque no es así. Nunca tuve novio. Ni Fernando ni nadie, más que nada porque yo nunca quise. Yo era de salir todos los fines de semana para disfrutar de la edad que tengo. Sí es cierto que me veía siempre con él. Pero, a ver, verte con alguien no es ser novios".
Vale recordar que Galarza fue entrevistada antes de que su defensa enviara a Casación la apelación de su pena, que ahora queda pendiente de confimación.
"Que digan lo que quieran"
Galarza se mostró también muy enojada contra los medios, a quienes acusó de "fomentar odio" y de pintarla "como una loca" ante la opinión pública. Su defensa también utilizó este argumento durante el juicio que tuvo lugar en Gualeguaychú: la condena social, aseguraban, había condicionado a los jueces.
"A mí las críticas o lo que se diga no me afecta porque yo sé lo que soy. Pero me influyó muy negativamente en la causa. Yo pensaba que lo social no iba a influir pero bueno, se ve que sí. Que digan lo que quieran, no me conocen. Tampoco tengo necesidad de que me conozcan, eso me da igual. Pero tampoco para que me juzguen como me juzgaron".
Al mismo tiempo, negó que haya tenido intenciones suicidas. "No tengo idea de dónde salió eso. Los querellantes y los abogados de la otra parte me querían hundir a toda costa, y habrán usado eso como estrategia, no se", explicó.