01 Noviembre de 2016 15:12
Martín Lanatta está enojado. El condenado por el triple crimen de General Rodríguez y protagonista de la triple fuga que conmovió al país hace diez meses, se queja porque considera que las condiciones de su detención en la cárcel de Ezeiza son malas. "Con las cosas que me hacen, quieren que me explote la cabeza o enloquezca", le dijo a BigBang Martín Lanatta.
Martín Lantta está en el pabellón 3 H del Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza.
"Quiero trabajar, pero no me lo permiten. Mi abogado ya hizo el pedido correspondiente. Acá se pueden hacer bolsas en el taller del penal, pero incluso si no me quieren dejar salir del pabellón que me traigan las bolsas así las armo en mi celda. Durante un tiempo me frenaban las audiencias. Es un maltrato psicológico", se quejó Martín Lanatta.
"El plan es cansarme, para que no denuncie, para que sea un autómata. Hay guardias que son fieles a la conducción de los hombres de Aníbal"
"Quieren que me explote la cabeza estando todo el día encerrado, viendo la nada".
"Sufro un trato despectivo. Como excusa para mentenerme en el pabellón de máxima peligrosidad siempre ponen que tengo concepto pésimo cero. Mi conducta es 9, pero nunca me van a poner un buen concepto".
"En una requisa hasta me robaron el ventilador, no me lo devuelven. Analizo denunciarlos por robo. Y denunciar también que los encargados del taller, Mejía, Escobar y el director del penal, no me quieren dar trabajo".
"Es importante la posibilidad de trabajar. Uno se mantiene entretenido y es un derecho. Hasta podría hacer orfebrería, mi oficio de toda la vida".
Lanatta recibió la visita estos días de un juez federal de Santa Fe y de la jueza de Mercedes Marcela Otermín, ante quien podría denunciar las malas condiciones de detención que asegura sufrir.
Su hermano Cristian también había denunciado este año maltratos en Ezeiza. "Un preso me apretó y me dijo que querían matarme y en mi celda me tiraban ratas para que no pudiera dormir", dijo en su momento. "Es todo mentira, esta gente miente, no hay ningún tipo de maltrato", dijo un vocero del Servicio Penitenciario Federal.
Lanatta volvió a acusar a los guardias penitenciarios.
La obsesión Aníbal
Desde que fue recapturado, Martín Lanatta acusó a al ex jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, de querer matarlo. "Quiso eliminarme", dijo uno de los tres prófugos de la escandalosa triple fuga de General Alvear, ocurrida el 27 de diciembre de 2016.
Hace cinco meses, Lanatta declaró en el penal de Ezeiza ante la jueza federal María Servini de Cubría. Sobre Aníbal Fernández, a quien antes había acusado de estar detrás de los asesinatos de Sebastián Forza, Leopoldo Bina y Diego Ferrón, ocurridos en agosto de 2008, declaró: "Quería buscar gente para eliminarme, la fuga fue armada por él. Primero dijo que era a cambio de que cambiara mi declaración y no lo acusara”.
Lanatta volvió a acusar a Aníbal.
Lanatta dijo que otro preso de Ezeiza, "del entorno de Aníbal Fernández", intentó "eliminarlo".
Hasta ahora, Aníbal minimiza las acusaciones de Lanatta.
La otra denuncia
"Nos abrieron la puerta de la cárcel y nos dimos cuenta que era para matarnos", declaró hace hace cinco meses Martín Lanatta a la jueza María Romilda Servini de Cubría.
Martín Lanatta durante su traslado a la cárcel de Ezeiza, hace dos meses.
"Nos abrieron la puerta de la cárcel y nos dimos cuenta que era para matarnos", declaró Lanatta, condenado a perpetua por el triple crimen de General Rodríguez. La declaración fue en el penal de Ezeiza, donde está detenido desde hace diez meses.
"Los tres" estuvieron prófugos durante dos semanas.
Cristian Lanatta también llegó a denunciar al Servicio Penitenciario Federal por maltratos.
Además, Martín Lanatta anunció que está por denunciar a la procuradora general bonaerense, María del Carmen Falbo, "por ser parte del plan de Aníbal Fernández para acusarnos a nosotros con pruebas falsas a través del fiscal (Martín) Martín Bidone".
Condenados
Los tres prófugos se habían escapado el 27 de diciembre de 2015 de la cárcel de General Alvear, donde cumplían una condena a cadena perpetua por los crímenes de Sebastián Forza, Diego Ferrón y Leopoldo Bina, cuyos cuerpos fueron encontrados en General Rodríguez el 13 de agosto de 2008. Los tres prófugos que en enero conmovieron al país fueron condenados en diciembre de 2012 a cadena perpetua por el Tribunal Oral Criminal Nº 2 de Mercedes. “Nos condenaron sin pruebas, y hubo muchas irregularidades que ya se sabrán”, dice Lanatta.