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Lavado de dinero, armas y la desaparición de Cecilia: "La madre de César fue el cerebro de todo esto"

Mercedes, la tía abuela de la víctima, dio detalles del crimen que conmueve a todo Chaco. 

19 Junio de 2023 14:19
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Cecilia Strzyzowski fue vista por última vez el 1° de junio en la ciudad de Resistencia y para su tía abuela, Mercedes, el crimen fue orquestado por su ex, César Sena y su madre, Marcela Acuña, ambos detenidos. "Nunca los vi pelearse. Eran el matrimonio perfecto, por eso digo que deben darle el Oscar a mejor actor. ¿Quién fue capaz de hacer eso? César instigado por la madre. La madre fue el cerebro de todo esto, no me cabe la menor duda", sostuvo la mujer.

Los investigadores del femicidio de la joven de 28 años sospechan que cinco de los siete imputados tuvieron un rol directo en la consumación del asesinato, mientras que los otros dos acusados participaron en la desaparición del cuerpo. En ese marco, el Equipo Fiscal Especial (EFE) conformado para el caso por Jorge Cáceres Olivera, Jorge Gómez y Nelia Velázquez aguardan los resultados de una serie de peritajes.

Entre ellos, se destacan los restos quemados de una valija y de ropa que presuntamente pudieron haber pertenecido a la víctima y que fueron hallados el domingo. "Ella en su valija se puso dos buzos frizados y un pantalón. Era una valija que yo le presté, negra, más o menos de 60 centímetros. No era una valija grande porque apenas entraron los dos buzos y tenía rueditas. Ella tenía un saquito rosado y después del incendio, me dijeron que quedaron los botones", contó Mercedes.

La mujer dialogó con TN y reveló que "la tela rosa" encontrada entre los restos calcinados forman parte "del saco que se había comprado hace poco" Cecilia. "Por el tamaño, que vi anoche la foto, es la valija que yo le dí", detalló.  Los efectivos policiales constataron que entre los pastizales había una valija, prendas de vestir (posiblemente una campera o buzo de color rosa) y una llave, entre otras cosas quemadas, por lo que se perimetró la zona para su secuestro.  

"Te digo sí y mil veces sí": el supuesto anillo de compromiso de Cecilia, entre los objetos quemados

De acuerdo con la mujer, la última vez que vio a su nieta fue aquel jueves, a las 23. "La última vez que la vi con vida fue acá, que se despidió, cuando teóricamente viajaban a Ushuaia. Vivieron acá porque ellos (por los Sena-Acuña) tienen varias propiedades, pero la madre de él no les quería dar la llave; y yo les dije que vengan acá, que lujo no había, pero techo y comida no les iba a faltar", contó Mercedes. 

Y siguió, sobre aquella trágica velada: "Esa noche se despidió de acá porque el viernes iban a dormir, teóricamente, en la casa de los suegros porque a la vuelta vivía una prima que era la que los iba a acercar a Corrientes y de ahí viajaban a Buenos Aires". Según Mercedes, Cecilia y César vivieron en la casa de ella durante 6 meses. "Ellos iban a irse a vivir a un departamento, pero como la madre de él no la quería, no les dio las llaves", explicó.

En ese sentido, detalló que el acusado de 19 años le había dicho a su mamá que iba a ir "con la moladora" a romper la puerta de aquel departamento, aunque aclaró que eso nunca ocurrió. Tres días antes del supuesto viaje, César le dio un ramo de flores con el siguiente mensaje: "Un mes más a la colección, te admiro por aguantarme, te agradezco el amarme y te doy las gracias por ser mi mundo. ¡Vamos por más aventuras!". 

En ese contexto, Mercedes remarcó: "Cuando iba a dar clases al centro en una de las escuelas del barrio, él no volvía con las manos vacías. Venía con un ramo de flores, con cajas de bombones o un pote de helado. Debería tener el Oscar de Hollywood por gran actor. Parecía un chico aparentemente sumiso. Él nunca puso un peso acá para comer, pero me hacía los mandados como cualquier hijo de la casa".

Además, detalló que la pareja se retiró de la casa ese jueves "a ese viaje que nunca existió". "La pasó a buscar el jueves a las 23. Ella se fue con una valija chiquita, negra, que le presté. Pero lo que me llamó la atención es que él vino con una mochilita chica. Le dije ´¿eso vas a llevar vos? mirá que hace frío allá´ y me dijo ´en Buenos Aires voy a comprar toda la ropa´", destacó

La mujer resaltó que el hijo de Emerenciano Sena y Marcela Acuña "se creía un perseguido político" y que, por tal motivo, "siempre estaba armando", "Tenía una pistola chica. Él la mostraba y se la ponía en la cintura, cuando dormía la dejaba en la mesa de luz. Cuando allanaron el campo encontraron cualquier cantidad de municiones de todos los calibres", sostuvo Mercedes.

Y sobre restos quemados de una valija y de ropa que presuntamente pudieron haber pertenecido a Cecilia, advirtió: "Para mi son los anillos de Cecilia los que encontraron. también encontraron los restos de un auricular y ella vivía con auriculares. Esa alianza con el brillante se la regaló él y cuando se casaron se puso la de la alianza, las dos juntas".

Y continuó: "En una reunión de un asado que tuvimos acá, él se jactaba de que ellos hacían desaparecer gente, que simulaban que la víctima se iba de viaje y que nadie la buscaba. Decía que se los daba a los chanchos porque los chanchos hasta los huesos comían. Lo contaba con mucha naturalidad y nosotros decíamos que estaba fanfarroneando, no podíamos creer que hiciera esas cosas".

La tía abuela de la víctima manifestó que César nunca habló mal de su familia, aunque también explicó que Acuña se molestaba cuando su hijo se quedaba a dormir en su casa. "Él nunca habló mal de la familia ni nada. Cuando él se quedaba a dormir acá, ella (por Marcela Acuña) le mandaba el chofer para buscarlo, para que duerma en su casa. Cuando él le decía que no, ella le decía ´vení a dormir acá o sino voy a esa casa a armar un escándalo´", detalló.

A pesar de eso, remarcó que "nunca" los vio pelearse. "Eran el matrimonio perfecto, por eso digo que deben darle el Oscar a mejor actor. ¿Quién fue capaz de hacer eso? César instigado por la madre. La madre fue el cerebro de todo esto, no me cabe la menor duda", dijo, mientras mostraba ante las cámaras las pertenencias del acusado, entre ellas su moto, la caja registradora del bar Gato Negro y un par de guantes de boxeo.

Cecilia junto a César habían abierto una cafetería en el centro de la ciudad de Resistencia llamada Gato Negro. De hecho, en febrero pasado, la mujer recibió a una periodista del noticiero Norte Grande Federal en su local gastronómico, ubicado en Hipólito Yrigoyen al 400, y contó que lo había inaugurado en noviembre del 2022, pudiendo así cumplir un gran anhelo: “Desde que soy chiquita me gusta lo que es la cocina", señalaba.

Pero para Mercedes, ese bar fue sólo una pantalla para "lavar dinero".  "Andaba bien el bar ese. Lo único que me dijo es que él le había dicho que ese bar estaba en ´condiciones de lavar dinero´. Entonces ella no fue más. Cecilia le dijo que en eso no quería estar metida, que no quería terminar presa y no fue más. Ahí se cerró el café. Eso fue hace rato porque el bar funcionó dos meses  y entonces se cerró", dijo.

Además, adelantó que como los padres de César seguían pagando ese alquiler, el acusado estaba en medio de los preparativos para transformarlo en un gimnasio. "No me llamaron a declarar. Declaré en la policía nomás, pero en fiscalía no. Me secuestraron el teléfono, lo tiene la policía. Tuve que armar el teléfono viejo con otro chip. me lo sacaron porque tenía los mensajes de él cuando ella estaba supuestamente en Ushuaia", señaló.

Y finalmente, sentenció: "Quiero que remuevan cielo y tierra para que aparezca algo de mi nieta, porque si la descuartizaron quiero que aparezca una pierna, la cabeza o algo para tener la certeza". Para los fiscales, Emerenciano Sena y Marcela Acuña, su hijo César, Fabiana González -asistente del matrimonio- y su pareja Gustavo Obregón tuvieron un rol directo en el crimen de Cecilia, ya que para ellos todos estuvieron en la casa de Santa María de Oro 1460, donde sospechan que ocurrió el ataque.   Por ello, al matrimonio lo imputaron por "homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas en calidad de co-autor".

A su hijo lo imputaron por ese mismo delito más el del "vínculo y por haberse realizado en un contexto de violencia de género (femicidio)". En tanto, a González le endilgaron el "homicidio agravado en calidad de partícipe necesario" y a Obregón como "partícipe secundario". "Todavía estamos investigando bien el rol de cada uno en la escena pero los cinco estuvieron en la vivienda donde sucedió el hecho investigado", dijo un vocero encargado de la pesquisa.